Paraguay

Fumigación de soja transgénica

se cobró dos víctimas campesinas

El avance del cultivo de la soja transgénica en Paraguay ya cobró sus primeras víctimas del año, luego que dos campesinos fueran asesinados por la policía en el distrito Repatriación del departamento de Caaguazú, a unos 300 kilómetros de Asunción. 

 

 

Otros nueve labriegos resultaron heridos y más de 40 fueron detenidos. El enfrentamiento se produjo entre efectivos fuertemente armados de la Agrupación de la Policía Ecológica y Rural (APER) y unos 50 campesinos que se trasladaban en camión hasta el asentamiento Juliana Fleitas, ubicado en la colonia Ypecuá, cercana Repatriación, para intentar impedir la fumigación de unas 70 hectáreas de soja pertenecientes al menonita David Enns.

 

El fuego comenzó cuando el chofer del camión que trasladaba a los campesinos no paró la marcha de su rodado e intentó eludir una patrulla policial que se interpuso en el camino, a escasos 500 metros de Ypecua. Los policías persiguieron al camión que transportaba a los labriegos y comenzaron a disparar hacia todas las direcciones y no precisamente a las ruedas del vehículo para intentar detenerlo, según indicaron los testigos del hecho.

 

Una de las balas dio entre las piernas de un joven agricultor de 26 años, Mario Arzamendia, y en varias zonas del cuerpo de Carlos Robles Correa, de apenas 22, quien recibió cuatro proyectiles. Ambos murieron luego de llegar al sanatorio Paz y Vida de Repatriación.

 

La resistencia campesina se había iniciado ya el martes 22 a la mañana, cuando se produjo el primer enfrentamiento armado entre los labriegos que se oponían a la fumigación y los efectivos de la APER. En esa ocasión se registraron varios heridos de poca consideración en ambos grupos.

 

Dispararon con fusiles M16

 

El fiscal de la jurisdicción que interviene en el caso, Ángel Baranda, presenció el hecho porque se encontraba a la vera del camino, con la comitiva policial, esperando que amainara la lluvia para poder llegar hasta el asentamiento campesino, ubicado a escasos metros de las plantaciones de soja del menonita David Enns.

 

Según Baranda, el incidente se originó luego que el chofer del camión no respetara la orden de alto dada por los policías, que formaron una barrera. Los agricultores fueron baleados nada menos que con fusiles M16. Algunos de los disparos impactaron en los dos campesinos que iban en la carrocería del vehículo, y otro más en la cabeza del chofer, Fernando Villasboa, de 42 años, que se encuentra internado en el Hospital de Emergencias Médicas de Asunción en gravísimo estado.

 

El secretario general de la Federación Nacional Campesina (FNC) de Caaguazú, Adrián Vázquez, dijo que los disparos fueron iniciados por los efectivos del orden cuando apenas faltaban 500 metros para llegar a la colonia Ypekua, en donde se encontraba el grueso de los manifestantes que quería evitar la fumigación de la soja transgénica.

 

La FNC, que aglutina a los campesinos de Ypekua, declaró el alerta nacional, movilizando a todos sus adherentes en forma permanente. Este gremio instó a la sociedad en general a unirse contra lo que consideran un atropello al derecho de manifestación y defensa de las comunidades rurales.

 

Ministro ordena arresto de policías

 

Para tratar de salvar la grave situación, el ministro del Interior, Orlando Fiorotto, ordenó como primera medida el cambio de dos jefes policiales del departamento de Caaguazú. Fiorotto indicó ofuscado que los policías desobedecieron órdenes expresas del gobierno nacional de no utilizar armas de fuego para reprimir a manifestantes, ocupantes de tierras o, como en este caso, para los procedimientos dirigidos por fiscales en las fumigaciones de cultivos.

 

Los oficiales que fueron relevados de sus cargos son los jefes de la APER Fidel Alejandro Isasa y Rogelio Benítez.

 

Fiorotto señaló que en anteriores intervenciones producidas durante el actual gobierno de Nicanor Duarte Frutos no se habían utilizado armas de fuego, sino tan sólo balines de goma y gases lacrimógenos. A su vez, los los agentes que dispararon contra los campesinos fueron arrestados en la Agrupación Especializada. Se trata de los suboficiales Elvio Esquivel y Carlos Giménez, quienes según el comandante de la Policía Nacional, Juan Umberto Núñez, serían procesados. Similar disposición adoptó Fiorotto contra el efectivo policial que extrajo los fusiles de la armería y los entregó a los autores de los disparos contra los campesinos.

 

En tanto, en el ámbito oficial se hablaba con insistencia de que los trágicos acontecimientos del martes y miércoles en Caaguazú adelantarían el regreso al país del presidente Duarte Frutos, quien se encuentra de vacaciones en Brasil. Sin embargo, sus colaboradores más cercanos aseguraron que la situación estaba controlada, por lo que el primer mandatario seguirá descansando, sin que nada ni nadie lo perturbe, hasta el lunes 26.

 

Senador responsabilizó a ministro del Interior

 

El senador José Nicolás Morínigo, del partido País Solidario, responsabilizó al ministro del Interior, Orlando Fiorotto, y al comandante de la Policía Nacional, Juan Umberto Núñez, de la salvaje represión a los campesinos de la colonia Ypekua.

 

“La policía tiene la responsabilidad del manejo legítimo de las fuerzas, que debe hacerse dentro del marco que establece la ley. Ella está para garantizar la libertad y la vida de los ciudadanos y no justamente para asesinarlos. La responsabilidad por estos crímenes recae directamente sobre el ministro del Interior y el comandante de la Policía Nacional”, destacó.

 

El legislador sostuvo que Núñez debería renunciar al cargo, por no tener el coraje ni la paciencia necesarios para enfrentar este tipo de situaciones. “Si los policías no tenían órdenes de disparar, ¿por qué portaban nada menos que fusiles M16? ¿Cuál es la razón? Si los efectivos van a hacer un procedimiento armados con M16, es obvio que es para utilizarlos”, manifestó ofuscado el senador.

 

Morínigo dijo también que la actitud de la Policía Nacional es ilegal porque no se puede usar la violencia de una manera desproporcionada en contra de personas que simplemente se están manifestando o realizando actos de protesta.

 

Campesinos culpan al gobierno

 

La dirigencia de la Mesa Coordinadora Nacional de Organizaciones Campesinas (MCNOC) responsabilizó al gobierno de Nicanor Duarte por la represión que sufrieron los labriegos del departamento de Caaguazú.

 

La MCNOC señaló en un comunicado que una vez más la actual administración, en vez de promover alternativas de producción y el desarrollo de los pequeños agricultores, defiende los intereses de unos pocos productores de soja que promueven el avance de la producción empresarial agroexportadora.

 

Los campesinos consideran que ese veloz avance está atacando a diario a las comunidades de pequeños productores paraguayos con el uso indiscriminado de agrotóxicos que atentan contra la vida de la población y contra el medio ambiente.

 

 

 

Rosalía Ciciolli

© Rel-UITA

26 de enero de 2004

 

  UITA - Secretaría Regional Latinoamericana - Montevideo - Uruguay

Wilson Ferreira Aldunate 1229 / 201 - Tel. (598 2) 900 7473 -  902 1048 -  Fax 903 0905