En la manifestación 
                    pacífica participaron habitantes de la población de General 
                    Farfán, 195 km al noreste, en la selva de la Amazonia y en 
                    pleno límite con Colombia, que se sienten afectados por las 
                    fumigaciones aéreas con glifosato sobre cultivos ilícitos 
                    realizadas del otro lado de la frontera. 
                    En la protesta, 
                    varias mujeres hicieron una parodia sobre la elección de 
                    Miss Universo-2004, que se celebró el pasado martes en 
                    Quito, presentándose con bandas ceñidas como Miss Glifosato, 
                    Miss Plan Colombia y Miss Fumigaciones. 
                    Mientras, un 
                    defensor de los derechos humanos realizó una simbólica 
                    fumigación con “glifosato” en el acceso principal a la 
                    legación colombiana. 
                    “Durante cuatro 
                    años han respondido que las fumigaciones no provocan daños a 
                    la salud y el ambiente”, expresó Alexis Ponce, portavoz de 
                    la Asamblea Permanente de Derechos Humanos (APDH) de 
                    Ecuador. 
                    Agregó que los 
                    gobiernos de los dos países han sostenido que son 
                    exageraciones no comprobadas científicamente y 
                    sensacionalismos no sustentados técnicamente todas las 
                    denuncias, testimonios y afecciones en la piel de las 
                    comunidades ecuatorianas en la frontera. 
                    Los habitantes de General Farfán, en la provincia amazónica 
                    de Sucumbíos, exigieron atención gubernamental a sus 
                    demandas sobre los efectos negativos que están generando las 
                    fumigaciones con glifosato. 
                    Una comisión 
                    técnica y científica colombo-ecuatoriana está investigando 
                    las denuncias de los ecuatorianos para establecer su 
                    veracidad, para lo cual ha visitado Sucumbíos, limítrofe con 
                    el cocalero y convulsionado departamento colombiano de 
                    Putumayo.