La tala de árboles comenzó en marzo del año pasado y, de
acuerdo con un contrato firmado entre particulares, debió
haber finalizado en octubre, pero aún continúa.
La primera denuncia fue realizada hace un mes y medio ante
la Intendencia canaria, pero una compleja indefinición entre
las divisiones notarial, urbanismo y medio ambiente, impide
la detención de las obras.
Machado denunció que se están desconociendo ordenanzas de la
propia Intendencia Municipal.
"Criminal"
El predio en cuestión está ubicado en la Ruta Interbalnearia
Km. 41,500. Su extensión total es de aproximadamente 30
hectáreas y el área que está siendo deforestada tiene
alrededor de 5 hectáreas.
Cuando el terreno fue vendido en lotes en el año 1943
quedaron gran cantidad de espacios verdes.
"Pero los dueños originales desaparecieron y la propiedad
pasó a manos de la sucesión Sassón", explicó Machado a LA
REPUBLICA.
"Es una historia bastante complicada, porque hay planos
originales del ingeniero Fabini donde aparecen esos espacios
verdes, pero en 1977 los sucesores hicieron otro plano donde
los hicieron desaparecer".
"En aquella época se hicieron gestiones ante la Intendencia
de Canelones para regularizar la situación, pero nunca hubo
una resolución. Ahora estalló el problema, porque empezaron
a desmontar esos predios de una manera criminal".
Machado presenta fotocopias de los trámites iniciados ante
la Intendencia Municipal de Canelones y la Dirección
Nacional de Medio Ambiente, procurando que se disponga la
inmediata detención de las tareas.
"Lamentablemente, el expediente pasa de una dirección a
otra, sin solución, y el desmonte continúa. En poco tiempo
nos vamos a quedar sin árboles en el balneario", denunció.
Hasta el momento sólo se ha conseguido una resolución del
Departamento de Areas Naturales Protegidas Costeras y
Marinas de la Dirección Nacional de Medio Ambiente. En la
misma se exhorta a la comuna canaria a declarar la zona como
"reserva ecológica", como forma de atenuar las agresiones
que está sufriendo.
La resolución pide que se tomen medidas precautorias para
evitar la pérdida de especies forestales, que "han permitido
la evolución de un ecosistema costero importante".
Machado dijo que es la única reserva forestal que existe en
la costa canaria, desde el Arroyo Carrasco hasta Atlántida.
Definición urgente
Días pasados el tema tuvo una derivación insospechada. "Al
desmontar la zona sur quedó sin protección el resto del
balneario Fortín de Santa Rosa. Eso provocó que la semana
pasada un árbol cayera sobre un automóvil, muriendo una
persona y dejando a otra en grave estado".
"La forestación se realizó en el año 1931 y si hay vientos
fuertes, sin protección, los árboles comenzarán a caer uno a
uno", sentenció Machado.
"Cuando presentamos la primera denuncia ante la comuna
canaria, el director de Medio Ambiente, doctor Barranques,
presentó a su vez una denuncia policial ante la Seccional
22ª de Salinas.
Los efectivos detuvieron a los operarios de la empresa que
está trabajando en el lugar, pero la jueza de Atlántida dijo
que era un problema a resolver en la esfera de la Justicia
civil, porque hay un contrato vigente".
"Sin embargo, el contrato se firmó el 21 de junio de 2004,
autorizando la tala durante 90 días, pero aún hoy la siguen
haciendo".
"Si presentamos la denuncia ante la Justicia civil, el
juicio puede demorar varios años y cuando haya sentencia
definitiva ya no habrá ningún árbol en todo el balneario",
sostuvo el denunciante.
"En primer lugar, pedimos que la Intendencia tome una
resolución urgente para detener las tareas y que luego el
trámite siga su curso normal procurando una solución
definitiva", indicó.
La República
6 de junio de 2005