Denuncian impactos ambientales
y laborales de
empresas piñeras |
Trabajadores y vecinos
de fincas piñeras en Guácimo alzaron la voz por supuestos daños al ambiente
y atropellos laborales durante una gira que el Foro Emaús organizó a fincas
en la región del Caribe el viernes 14 de julio, que buscaba dar a conocer
las consecuencias de la expansión creciente de la producción piñera.
A la invitación acudieron
el defensor adjunto de los habitantes, Daniel Soley; funcionarios regionales
de los ministerios de Agricultura y Ganadería; Ambiente y Energía; regidoras
de Guácimo y Pococí y periodistas -principalmente de medios alternativos-.
Los organizadores lamentaron la ausencia de representantes del Ministerio de
Trabajo.
El área sembrada de piña en
Costa Rica supera las 30 mil hectáreas, situación que preocupa a los
dirigentes del Foro Emaús, quienes consideraron que la actividad genera
problemas ambientales, sociales, laborales y en otras actividades agrícolas.
Por tal motivo, dicha organización presentó una carta a la Defensoría de los
Habitantes, en la que exigen que se mejoren las condiciones ambientales,
laborales y de salud en las piñeras y que las instituciones del estado y las
Municipalidades hagan cumplir las leyes.
La Asociación Servicios de
Promoción Laboral (ASEPROLA), elaboró un informe para el Foro Emaús, el cual
señala que si bien es cierto la industria piñera genera empleo y actividad
económica en zonas donde posiblemente sea la única labor productiva, también
presenta un impacto devastador en las áreas anteriormente dichas.
CONTAMINANTES
Desde hace cuatro meses los vecinos de La Perla, un poblado
en la zona alta de Guácimo observaron que disminuía el cauce de la quebrada
la Leona y en ocasiones notaron una especie de nata blanca, lo cual los hizo
sospechar de posibles efectos del cultivo de la piña.
Pedro Oviedo González, un finquero de la zona manifestó que
los vecinos han denunciado la situación y nadie hace nada al respecto.
Agregó que también le han planteado el caso a la empresa Tico Verde, pero
sin recibir respuesta alguna.Otra de las preocupaciones de los pobladores de
La Perla es que los agroquímicos que se aplican en las plantaciones, puedan
contaminar el acueducto que abastece a cerca de 100 familias.
Jeaneth Vargas, secretaria del acueducto dijo que el
sembradío de piña está en una zona muy quebrada y en un sector más alto que
las tomas de agua, lo que podría provocar contaminación, además denunció que
los dueños anteriores de la finca concedieron una servidumbre de paso al
acueducto, la cual no es respetada por la empresa piñera.
El Ministerio de Agricultura y Ganadería de Siquirres realiza
un análisis de las cuatro empresas piñeras de la zona, pero aún no puede
adelantar resultados, porque la investigación está en proceso, expresó Marco
Antonio Rojas, funcionario de la entidad; sin embargo adelantó que el sector
donde se ubica la plantación no es apto para el cultivo de piña, debido a
las condiciones quebradas del terreno.
UNIVERSIDAD intentó conocer la versión de Alfonso Sancho,
gerente de Tico Verde, pero no fue posible localizarlo en los números
telefónicos que brindaron en la Empacadora ubicada en La Perla.
NIÑOS SIN AGUA
Los 78 niños y 27 adolescentes que asisten a la escuela y a
la telesecundaria de Cartagena de Río Jiménez de Guácimo deben cargar con el
agua de sus casas, porque el pozo de la institución brinda un líquido de muy
mala calidad, según la directora Sandra Delgado.
La Escuela de Cartagena está rodeada por piñales y bananales;
ambas prácticas agrícolas hacen uso extensivo de agroquímicos contaminantes,
deploró Rodolfo León Guzmán, del Comité Ambiental Local.
"El agua está contaminada, es de color amarillo, uno tiene
que tomarla, porque qué vamos a hacer, no podemos estar comprando agua",
dijo Teresa Vázquez, una madre de familia que vive a 100 metros de la
Escuela.
Vázquez manifestó que su hijo menor se ha visto afectado por
la calidad del agua, la cual a su criterio está contaminada, ya que detrás
de su casa es donde se abastecen las avionetas que fumigan las plantaciones
bananeras y alrededor de la escuela rocían los piñales con agroquímicos. El
defensor Adjunto de los Habitantes, Daniel Soley, invitó a los quejosos a
presentar formal denuncia, para tomar cartas en el asunto.
TRABAJADORES RECLAMAN
Comer y hacer las necesidades fisiológicas a la intemperie,
trabajar jornadas extenuantes y por menos del salario mínimo, son algunas de
las prácticas denunciadas por un grupo de trabajadores de la Empresa Piña
Frut en Pococí.
Ellos también acusaron a la empresa de persecución sindical:
"Tenemos un grupo de compañeros afiliados y ellos los manipularon diciendo
que iban a quedar en lista negra", señaló Paulo López García, trabajador de
campo.
De los 300 peones de la finca, 40 se han afiliado al
Sindicato de Trabajadores de Plantaciones Agrícolas (SITRAP), lo cual
provocó la molestia de los dueños, señaló Didier Leitón, asesor sindical de
esta organización sindical.
Por su parte, Víctor Mata, jefe de Recursos Humanos del Grupo
Acón, empresa a la que pertenece Piña Frut, explicó que no pueden tener
comedores móviles para los trabajadores de campo, pero que cuentan con una
soda para los empleados de la empacadora.
Aclaró que ellos tienen un arreglo directo entre el patrón y
los empleados, que les da la potestad de asociarse. Agregó que nunca han
perseguido a los trabajadores sindicalizados y que además, cuentan con
procedimientos para que puedan hacer sus reclamos o quejas.
En cuanto a las jornadas, señaló que se trabaja a destajo, lo
que les da la oportunidad a los peones de concluir la jornada cuando
finalizan la labor, ya que el pago es por hijo sembrado y no por tiempo
laborado.
López García, dijo que con ese sistema deben trabajar más
horas y para que les rinda la tarea en ocasiones deben laborar hasta 12
horas diarias, lo que hace que la jornada diaria resulte por debajo del
salario mínimo.
El encargado de Recursos Humanos refutó las declaraciones de
los trabajadores y anunció que trabajan para certificarse con la norma
internacional SA8000, para lo cual los salarios deben estar un 10% sobre los
mínimos.
El defensor Adjunto de los Habitantes, Daniel Soley, dijo que
se inició una investigación de oficio y el Ministerio de Trabajo elabora el
informe final de una investigación realizada a dos empresas piñeras.
Soley instó a vecinos y trabajadores que presentaron quejas
verbales, para que formalicen las denuncias ante las instancias
gubernamentales correspondientes y aporten pruebas y se comprometió a
coordinar con las autoridades gubernamentales, para buscar la mejor solución
posible.Explicó que los funcionarios de la Defensoría en Limón asesoran a
las personas para que epan cómo y dónde interponer las denuncias, ya que en
la mayoría de los casos, las quejas que se presentan son contra particulares
y no con las instancias gubernamentales.
Elsa Rojas Rodríguez
Semanario Universidad
21 de julio de 2006
Volver
a Portada