Abogado laboralista, asesor legal de la
Unión Nacional de Asalariados, Trabajadores Rurales y Afines
(UNATRA) y asesor de la legisladora izquierdista Ivonne
Passada, integrante de la Comisión de Legislación del
Trabajo de la Cámara de Diputados, Rammauro destaca en esta
entrevista el papel que han jugado los Consejos de Salarios
Tripartitos instaurados por el actual gobierno en el fomento
del proceso de sindicalización en el sector rural uruguayo.
La entrevista comenzó, no obstante, por un
contrapunto de Rammauro con el abogado Juan Pablo Saavedra,
quien en un una nota publicada en el número del 14 de julio
último en la revista uruguaya “Estado de Derecho” destaca la
“ilegalidad” de los Consejos de Salarios en el sector rural.
-El Dr. Saavedra estuvo muchos años trabajando en el
Ministerio de Trabajo, como asesor en la Dirección Nacional
de Trabajo. Nunca antes lo escuché
igual de preocupado por
lo que fue el incumplimiento sistemático por parte del
Ministerio de normas en materia salarial, como los convenios
de OIT ratificados por nuestro país, en particular estamos
pensando en los convenios 99 y 131 que ordenan al Estado a
consultar exhaustivamente a las organizaciones
representativas de trabajadores y empleadores antes de fijar
mínimos nacionales. Tampoco lo escuchamos en ese sentido
cuando integró la delegación del Poder Ejecutivo
precisamente en el Consejo tripartito rural. Ya no podremos
debatir con él en esas instancias porque el Ministerio lo
devolvió a su lugar de origen por tratarse de un pase en
comisión de Gobiernos anteriores. Más allá de su punto de
vista, que no compartimos, lamentamos que se ponga lo
pretendidamente académico al servicio de intereses menores
contrarios al sentir general.
Los cambios que se están procesando en el país han alcanzado
para convertir al tripartismo en un actor de primer nivel. Y
esto no es ajeno al ámbito rural donde las organizaciones de
asalariados y empresarios junto al Poder Ejecutivo han
elaborado una agenda común de temas a abordar y donde han
decidido darse la forma de Consejos de Salarios para
trabajar. Los interesados en que esto no funcione son
aquellos que no piensan respetar los acuerdos que ahí puedan
lograrse y en tal caso podrán recurrir a los argumentos e
incluso al asesoramiento del Dr. Saavedra y de otros que
como él piensen al respecto.
Desde el punto de vista técnico, solo agregar que las
conclusiones a las que arriben los Consejos de Salarios
terminan en un decreto que recoge los acuerdos , esto es,
los salarios del sector se fijarán por decreto como dice
precisamente el estatuto del trabajador rural, aprobado en
1978, en plena dictadura, vale recordar.
Si estamos a la línea argumental del Dr. Saavedra, todos los
Consejos de Salarios que hoy funcionan lo estarían haciendo
fuera de la ley. Todos se están excediendo tratando temas
ajenos a la determinación de categorías y salarios, como ser
en materia de libertades sindicales y condiciones de
trabajo. En el Tripartito rural se ha planteado incluso la
jornada de 8 horas, el sistema del pago a destajo, las
condiciones sanitarias y de higiene. Así lo acordamos
discutir con el Estado y organizaciones como la Asociación
Rural, la Federación Rural, la Asociación Nacional de
Productores de Leche, las Cooperativas Agrarias Federadas,
la Comisión Nacional de Fomento Rural o la Asociación de
Cultivadores de Arroz.
-¿Cómo evalúa usted lo actuado hasta el momento por el
Consejo Tripartito Rural?
-En realidad, los avances han sido muy pocos. El sector
empresarial se ha resistido muy fuertemente a acordar en
muchos aspectos. Sin embargo, este proceso ha servido para
fortalecer a la organización sindical, que ha aprendido a
trabajar mucho más en equipo. Ha servido para que se
comuniquen más fluidamente todas las organizaciones
representativas de trabajadores de las distintas partes del
país, ha servido para generar sindicatos en empresas donde
no los había. Hoy, por suerte, tenemos una UNATRA
consolidada, tenemos muchos sindicatos esparcidos por todo
el territorio nacional, y ese proceso de sindicalización
crece muy rápidamente.
Los Consejos han servido igualmente para marcar
convergencias con el gobierno. Para los empresarios, es muy
nuevo todavía el hecho de sentarse a dialogar con los
trabajadores y hacer concesiones. Creo que les cuesta mucho
más del lado de los principios que del lado técnico o de lo
que puedan ser las concesiones en sí.
-¿Y al Ministerio de Trabajo cómo lo ve?
-También está haciendo su experiencia. En razón de lo que
era la realidad del sector rural hasta hace muy poco tiempo,
el ministerio carece de negociadores especializados. En ese
sentido, la integración de la delegación del Poder Ejecutivo
es interesante: ha incorporado a abogados, pero también a
técnicos del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca,
que ayudan a entender de qué se está hablando. De todas
maneras, como UNATRA pretenderíamos del Poder Ejecutivo una
posición menos equidistante. A veces nos parece que exagera
en querer situarse en el justo medio, en avanzar pero
guardando la distancia. Nos parece que el Poder Ejecutivo
debería marcar su propia posición independientemente de si
en algunos momentos está acompañando más a un lado o al
otro, nos gustaría algo más comprometido en ese sentido, sin
abandonar claro está su rol natural de mediador , de acercar
a las partes cuando esto es posible. El fiel de la balanza,
no siempre está
en el medio si lo que se quiere es
equilibrio, el fiel acompaña siempre al plato de la balanza
que esta más vacío.
Rubén Yizmeyián
©
Rel-UITA
29 de julio de
2005
* Abogado de la UNATRA