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Desde hace 20 días las entidades agropecuarias bloquean las
principales rutas del país provocando un agudo
desabastecimiento de alimentos en las grandes ciudades. El
“Momo” Venegas, secretario general de la Unión Argentina de
Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE) aportó a Sirel su
análisis sobre esta situación.
-¿Cómo
caracterizarías al paro agrario?
-En Argentina existen las llamadas “retenciones” a la
exportación agropecuaria, y a partir del pasado 11 de marzo
el gobierno nacional las llevó del 35 al 44 por ciento. Esto
provocó que las economías regionales, los pequeños y
medianos productores salieran a implementar un corte de
rutas que no tiene antecedentes en la historia del país.
Llevan 20 días de paro y movilización, y continuarán por lo
menos hasta mañana, miércoles 2 de abril.
-El
lunes 1º hubo una oferta nueva del gobierno.
-Por intermedio del Ministro de Economía, la compañera
presidenta Cristina Fernández de Kirchner comunicó
que retiraba el último incremento del 9 por ciento en las
retenciones para todos los productores de menos de 500
toneladas de soja, que serían casi el 80 por ciento del
total. También les ofreció asistencia con los fletes, para
que puedan sacar sus cosechas a tiempo de los campos, cosa
que muchas veces se hace difícil. Esto es un aliciente,
porque las posiciones estaban muy duras de ambos lados.
Personalmente, asumí una actitud conciliadora, sin ponerme
de un lado o del otro, y haciendo énfasis en la necesidad de
la negociación.
-Hay
también quienes dicen que este es el paro de “la patria
sojera”, en alusión a los grandes terratenientes o empresas
interesadas solamente en la producción de commodities.
-Pero los grandes sembradores de soja son los Grobocatepel,
los pools de siembra que arriendan campos y plantan enormes
monocultivos de soja, quitándole fertilidad a la tierra. Es
importante que en las políticas agropecuarias que se tracen
hacia el futuro se tenga en cuenta que la soja genera
divisas para el país, pero no fuentes de trabajo. Quiere
decir que se puede sembrar soja, pero no descuidar la
producción de otras cosas esenciales para la seguridad
alimentaria del pueblo argentino, y que son actividades que
generan fuentes de trabajo.
-Y es un
modelo que, además, expulsa a los productores familiares del
campo.
-Como se ha visto en el caso de los tambos, de los cuales ya
cerraron 5 mil. Porque para alguien que tiene algunas
hectáreas de campo, hoy le es más rentable plantar soja que
ordeñar vacas. Y esto no es bueno para el país, porque
más allá de las pérdidas irreparables de los empleos que
desaparecen, un tambo no se monta de un día para el otro, se
pierden las pasturas adecuadas, los vientres, las
maquinarias… Nosotros sufrimos las consecuencias del
neoliberalismo, cuando en la provincia de Buenos Aires
perdíamos un productor cada ocho horas. Después vino el
gobierno de Duhalde que aportó alguna mejora, sacó al
país de la convertibilidad, y luego Kirchner que
también sacó al país de lo que fue quizás la peor crisis de
toda su historia. Ahora hay que planificar políticas de
Estado para el futuro. La Argentina no puede ser un
país exclusivamente sojero. Tenemos muchos productos
primarios que, en otros países, cuando no son rentables los
subsidian porque hacen a la seguridad alimentaria de la
población.
-Y
también hay que trabajar en la distribución de la riqueza…
-Sin duda. Creo que habrá un antes y un después de este paro.
El campo ya está en condiciones de sentarse a debatir todos
estos temas. No debe sentirse el convidado de piedra sino
integrante cabal de la mesa de discusión, y plantear todo lo
que crea útil y necesario. Por nuestra parte, vamos a
dialogar para que se blanquee la relación laboral con los
trabajadores, para que se terminen la mano de obra
indocumentada y el trabajo infantil, para que no haya más
analfabetos en el campo.
-¿Esto
que hoy aparece como “el campo” es un solo sector con los
mismos intereses?
-En este caso se han unido las cuatro entidades agropecuarias
que representan a grandes, medianos y pequeños. Lo deseable
es que entre ellas se respeten y alcancen políticas
consensuadas para todos los niveles.
-Hoy
habrá una movilización en apoyo al gobierno.
-Estará la Confederación General del Trabajo (CGT),
las 62 Organizaciones, grupos sociales, intendentes,
todos vendrán a la Plaza de Mayo para demostrar su apoyo a
la Presidenta de la Nación. Probablemente se reúnan más de
100 mil personas en apoyo a la democracia, al gobierno de
Cristina. Yo no tomaré parte en esa movilización, porque
tampoco estuvimos ni estaremos en los piquetes. Nuestra
posición es mediar para que haya negociación y se alcancen
acuerdos que permitan salir de este conflicto que ha
provocado pérdidas irreparables para el país. Este acto de
hoy no es contra el paro agrario sino en apoyo al gobierno
nacional y a la democracia.
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