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Todo el
sector palmero de Puerto Wilches se halla ahora paralizado en apoyo al Pliego de
Peticiones presentado por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria
Agropecuaria (SINTRAINAGRO) a los empresarios de la región. La CUT y la UITA
sustentan esta histórica movilización de los trabajadores de la palma. Luis
Alejandro Pedraza, presidente de la UNAC, actualizó la información para Sirel.
-¿Cómo son las características de la zona donde se desarrolla la huelga?
-Puerto Wilches es un
municipio ubicado sobre el margen del río Magdalena, en el departamento de
Santander, al nororiente del país. Tiene más de 55 mil hectáreas bajo cultivo de
palma aceitera.
-¿Cuál es el área afectada por el paro?
-La totalidad de las
fincas de esa zona están completamente paralizadas en este momento, a pesar de
que SINTRAINAGRO sólo tiene presencia en una sola finca.
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Los
asalariados deben comprar todo su equipamiento de seguridad y pagar
las herramientas de trabajo, siendo que desde hace muchos años eso
está prohibido en Colombia |
-¿Cómo se explica eso?
-Porque la enorme mayoría
de los trabajadores son tercerizados y se identifica con las reivindicaciones de
SINTRAINAGRO, que incluye el fin de las tercerizaciones y de las
cooperativas de trabajo asociado.
El paro es general y
exitoso porque los trabajadores han mantenido unidad a pesar de que los
empresarios agremiados en FEDEPALMA presionan al gobierno para que
movilice a la Policía contra los huelguistas, argumentando que los trabajadores
están actuando de forma ilegal.
-¿Qué otras respuestas han tenido las empresas?
-También iniciaron
denuncia penal contra la subdirectiva de SINTRAINAGRO en Puerto Wilches
acusándola de “toma ilegal de tierras”, y presionaron a los trabajadores
cooperativizados para que presentaran acciones de tutela ante la justicia
reclamando “libre derecho al trabajo”.
Son acciones contrarias a
los mecanismos legales constitucionales actuales. Ellos tienen obligación de
negociar con SINTRAINAGRO que es una entidad legalmente reconocida en el
país y representativa de los trabajadores como lo está dejando en claro esta
huelga total en todas las fincas y plantas aceiteras del municipio de Puerto
Wilches.
Ellos continúan
manteniendo prácticas completamente obsoletas en lo que se refiere a los
derechos de los trabajadores. Para poner un ejemplo, los asalariados deben
comprar todo su equipamiento de seguridad y pagar las herramientas de trabajo,
siendo que desde hace muchos años eso está prohibido en Colombia. Son las
empresas las que deben aportar todos estos elementos.
Estos mega
emprendimientos palmeros les han quitado todo a los pequeños agricultores que
antes producían en esta región, porque hasta sus tierras les quitaron mediante
engaños y ahora son asalariados de las fincas.
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La
parálisis de la totalidad de la producción y extracción de aceite
los está obligando a reflexionar |
Cabe agregar que estas
mismas condiciones de semiesclavismo que existen en Puerto Wilches son la que
padecen los trabajadores en todo el sector de la agroindustria, como el de las
flores, y en pequeñas áreas del banano donde SINTRAINAGRO aún no ha
llegado. Con pocas variantes, podemos decir que esto también se aplica para la
industria, y tenemos el caso del sector Bebida donde enfrentamos casi los mismos
problemas de tercerización y persecución sindical.
-¿Piensas que el paro ya les está haciendo mella?
-La parálisis de la
totalidad de la producción y extracción de aceite los está obligando a
reflexionar, y también los presiona el hecho de que están perdiendo dinero y no
están cumpliendo con contratos importantes.
-¿Qué ha hecho el gobierno?
-El Ministerio solo ha
ofrecido sus buenos oficios para que “reflexionen las partes”, y pretendió
persuadir a los trabajadores para que levantaran el paro argumentando que
entonces sí los patrones se sentarían a dialogar, pero sin incluir a
SINTRAINAGRO ni a la CUT.
Ayer mantuvimos una
reunión con el viceministro de Trabajo en la cual recibimos esa propuesta cínica
de las empresas, y hemos contestado que queremos que se constituya una mesa con
representantes de la CUT y con los voceros de FEDEPALMA a nivel
nacional, para definir una hoja de ruta y ver cómo se van a solucionar las
diferencias. Sin eso, continuará el paro.
El viceministro se
comprometió a hacer llegar esa respuesta a los empresarios y a convocarlos a una
reunión para mañana miércoles.
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