Latinoamérica
es la zona de mayor biodiversidad agrícola del planeta y
centro de origen de muchos cultivos fundamentales para la
alimentación humana, como lo son el maíz, la papa, porotos,
yuca, maní entre otros
Contradictoriamente es la zona con mayor
cantidad de cultivos transgénicos después de
Estados Unidos, con amplias áreas sembradas de
soja, maíz y algodón transgénicos.
Los cultivos transgénicos amenazan con destruir
miles de años de seguridad y soberanía
alimentaria de nuestros pueblos y con provocar
una irreversible contaminación genética como la
ya causada en México, país centro de origen del
maíz.
Los organismos manipulados genéticamente,
llamados transgénicos, son organismos nuevos
creados en laboratorio, cuyas características
han sido alteradas mediante la inserción de
genes de otras especies. Estos organismos no
pueden ocurrir en la naturaleza y no se puede
predecir como interactuarán con los ecosistemas
ni cuáles serán las consecuencias de su
liberación en el ambiente. Estudios científicos
y experiencias de campo demuestran que los
cultivos transgénicos no poseen un rendimiento
más alto que los cultivos naturales, que son más
contaminantes y que introducen nuevos riesgos
para la salud y para el ambiente.
En enero de 1999, con el objetivo de oponerse a
estos cultivos, organizaciones sociales reunidas
en Quito, Ecuador durante el "Seminario
Latinoamericano sobre Organismos Transgénicos y
Bioseguridad", crearon la Red por una América
Latina Libre de Transgénicos (RALLT).
La Red por una América Latina Libre de
Transgénicos determinó que el 21 de junio fuera
declarado como Día por una América Latina Libre
de Transgénicos. Este día fue escogido porque
coincide con el Solsticio de junio, día de mucha
importancia entre las culturas americanas, donde
se llevan a cabo una serie de prácticas
relacionadas con la cosecha del maíz, la papa y
otros cultivos.
Realidad del Uruguay
Legalmente en Uruguay hay tres cultivos
transgénicos aprobados (la soja RR y el maíz MON
810 y Bt11), pero la realidad es mucho más
compleja que esto. De acuerdo a la Cámara de
Semilla del Uruguay, durante el 2005 entraron al
país 95.000 toneladas de maíz como grano desde
Argentina.
Dentro de estas semillas podrían fácilmente
haber sido introducidas cualquiera o todas las
semillas de maíz transgénico aprobadas en
Argentina (maíz RR). El maíz que entra como
grano es solo para alimentar a los animales,
pero bien se sabe que una parte de éste es
plantada y por lo tanto la contaminación puede
ya existir.
Un importante vacío legal
En noviembre de 2005 se denunció a las
autoridades las irregularidades de la venta de
maíz dulce del transgénico Bt11 de semillas no
registradas por el Instituto Nacional de
Semillas. Frente a los hechos planteados, una
vez más quedó al descubierto que las
reglamentaciones no solo son insuficientes, sino
que además las pocas que existen tampoco se
cumplen.
Desde el 20 junio del 2003 existe una resolución
del Ministerio de Ganadería, Agricultura y
Pesca, junto con el Ministerio de Economía y
Finanzas donde se especifica que uno de los
requisitos para la venta de esta semilla es el
etiquetado: _En la etiqueta, que identifica el
envase de la semilla de maíz de este evento,
deberá incluir una referencia explícita a las
palabras: _MON 810_, de suficiente realce y
visibilidad, independientemente de cualquier
otra referencia a la variedad o a la
característica para la que codifica ese evento_.
Cabe mencionar que la resolución para el Bt11 es
exactamente igual con respecto al etiquetado.
El maíz dulce GH 0937 a la venta en Montevideo
no estaba etiquetado, las autoridades encargadas
de hacer el control no lo hicieron y solamente
en noviembre del 2005 se toman medidas concretas
después de la denuncia de estas irregularidades
desde la sociedad civil. A la fecha las
autoridades aún siguen investigando las
irregularidades&&
Este hecho muestra que el país está lejos de
cumplir con un marco de bioseguridad y de tener
las herramientas adecuadas para implementar el
mismo. A esto se suma la dificultad concreta con
la que nos debemos de enfrentar una vez
liberadas las semillas transgénicas, ya que la
naturaleza no se puede controlar y mayor riesgo
se corre cuando de maíz se trata, por el tipo de
polinización que realiza.
Desde agosto del 2005 se reúne el Comité de
Bioseguridad. Este comité está integrado por
distintos actores, desde empresarios, organismos
del estado y organizaciones no-gubernamentales.
El objetivo de este comité es la elaboración de
un Marco Nacional de Bioseguridad. Dada la
situación actual de los transgénicos, pareciera
difícil hablar de un marco de Bioseguridad,
cuando todo nos indica que la bioseguridad ya ha
sido violada, no por los transgénicos aprobados
hasta la fecha sino por toda la semilla ilegal
que entra al país y por la incapacidad de poder
controlar.
¿Transgénicos
"regulados" o país libre de transgénicos?
La elaboración de un marco regulatorio y
políticas claras podrían ayudar a que hubiese
una mayor transparencia y se llenase ese vacío
legal en el cual todos los uruguayos nos
encontramos. Sin embargo, si en el comité de
bioseguridad no participan activamente los
organismos de gobierno con posiciones discutidas
y acordadas dentro de los ministerios
involucrados, si la población en su conjunto no
está informada para poder opinar y ser parte de
este proceso de decisión, si tampoco se hace una
evaluación de los impactos ocasionados por estos
cultivos y el Estado opta por los organismos
genéticamente manipulados, entonces el marco
regulatorio será meramente un acto más de
burocracia y no de discusión.
Más allí del buen o mal funcionamiento del
comité de bioseguridad, es importante resaltar
que el propio concepto de bioseguridad debería
implicar la no autorización de los cultivos
transgénicos, dado que estos atentan gravemente
contra la seguridad biológica, posibilitando la
contaminación de cultivos no transgénicos y
pudiendo afectar la salud humana. La
bioseguridad debería implicar que la población
en su conjunto pueda tener la posibilidad de
optar por un país libre de transgénicos y no por
un país de transgénicos simplemente _regulados_.
RAPAL Uruguay*
21 de junio 2006
|