Dos tercios de los cultivos de EE.UU. han sido contaminados por plantas genéticamente modificadas, lo que puede tener consecuencias graves para la agricultura e incluso la salud, según publicó “The Independent on Sunday”.

La comisión de Medio Ambiente del Parlamento británico trató el viernes el informe del que ayer se hacía eco el diario británico y que fue auspiciado en EE.UU. por la Unión de Científicos Comprometidos. Estos científicos querían que el Reino Unido reconsidere su reciente decisión de plantar maíz transgénico. “No debería tomarse decisión alguna sobre el cultivo comercial de transgénicos hasta que se completen y publiquen estudios sobre la experiencia estadounidense”, aseveró la comisión. Los científicos americanos analizaron cultivos de maíz, colza y soja. Del examen de muestras de seis variedades de semillas concluyeron que al menos un 50% de las de maíz y soja, y un 83% de las de colza, contenían información genética de los transgénicos. La contaminación podía ser por el polen o la mezcla de semillas durante su procesado.

La Vanguardia / COMFIA - CCOO

9 de marzo de 2004