En Uruguay nos invaden
El gobierno irlandés recientemente ha prohibido
los cultivos transgénicos e introducirá el
etiquetado voluntario para alimentos procesados
que contengan carnes, aves, pescado y productos
lácteos hechos de animales alimentados con
raciones libres de transgénicos. Esta medida fue adoptada en el documento “Propuesta
renovada del programa de gobierno” del día 10 de
octubre.
Aparentemente esta medida tomada por gobierno irlandés, no es
por razones científicas o éticas sino por
presiones sociales. Existe a nivel mundial un
crecimiento del movimiento de consumidores que
quieren consumir alimentos sin transgénicos y la
presión se ha hecho sentir en Irlanda.
A
raíz de esta demanda de alimentos libres de
transgénicos, el gobierno irlandés vio esto como
una oportunidad de ocupar ese mercado con
producción propia, dado que sus vacunos son
alimentados básicamente con pasto en vez de
pienso.
Gran parte del pienso a nivel mundial es
producido con soja y maíz transgénicos.
Irlanda
será el noveno país de la Unión Europea que
prohíbe los cultivo transgénicos en su
territorio, sumándose a Alemania, Rumania,
Italia, Polonia, Francia, Grecia, Austria y
Hungría, países que han aprobado la moratoria al
maíz transgénico MON-810, el mismo que se
cultiva legalmente en Uruguay.
Uruguay ¿a quien le compete?
Mientras países como Irlanda ven una oportunidad única
de llenar un nicho de mercado con una
agricultura y cría de ganado libres de
transgénicos, nuestro país solo parece aspirar a
ser un “país productivo”, que incluye el cultivo
de más y más transgénicos.
El departamento de Montevideo, a pesar de tener todas las
condiciones para que continúe siendo el único
departamento del Uruguay libre de
transgénicos, está siendo amenazado por la
siembra de soja transgénica.
En declaraciones realizadas el día 3 de octubre en el
suplemento del diario El País “Que Pasa”, el
director de la Unidad Montevideo Rural, el
técnico agrónomo Andrés Silva, en
relación a cultivar transgénicos en Montevideo
dijo que lo que ha frenado el ingreso de los
transgénicos al departamento es que "El tamaño
promedio de un predio rural en Montevideo es de
10 hectáreas. Con un tamaño así, no es
redituable hacer uso de los transgénicos para el
cultivo de soja o maíz, que son los que más
atención han concitado". A pesar de las escalas
-o tal vez gracias a ellas- el departamento más
chico del país produce una cantidad
significativa de hortalizas de hoja (la mitad de
lo que se consume en el país de lechuga, acelga
y espinaca tiene su origen en Montevideo), así
como de manzanas, duraznos, peras y ciruelas.
En la misma nota, el representante de la Unidad Montevideo
Rural aclara que la Intendencia no tiene
competencia superior al Ministerio de Ganadería,
Agricultura y Pesca (MGAP): "Si ellos aprueban
algo, no podemos prohibirle a nadie que haga uso
de esa semilla".
No solo en Montevideo avanzan los transgénicos
Próximo a la ciudad de Rocha se sembrará soja
transgénica en 700 hectáreas, que se sumarán a
otras tantas sembradas en años anteriores.
La peculiaridad de estas nuevas hectáreas será
que unas cuantas se sembrarían en parte del área
comprendida de la Laguna de Rocha, área que
estaría por incorporarse al Sistema Nacional de
Áreas Protegidas (SNAP), una vez que se
promulgue el decreto correspondiente por parte
del Poder Ejecutivo. Si bien es cierto que esta
zona aun no ha sido decretada Área Protegida e
incorporada al SNAP, actualmente se
encuentra avanzado el proceso de ingreso, su
aprobación es solo cuestión de tiempo, dado que
ya se han realizado todos los trámites legales,
como la Audiencia Pública previa.
Lamentablemente,
las tierras de esta zona ya están siendo
preparadas para la siembra y una vez sembrada la
soja será muy tarde para revertir los daños
causados a la biodiversidad de esa zona y la
contaminación ineludible sobre la Laguna de
Rocha.
Las autoridades valoran la importancia que tiene el
departamento de Montevideo por la producción de
hortalizas y frutas para gran parte de la
población de nuestro país y concuerdan en que
bien valdría la pena que continuase con ese tipo
de producción. Las autoridades también valoran
la riqueza en biodiversidad y la necesidad de
conservar los recursos naturales que rodean la
Laguna de Rocha. A pesar de ello, las
autoridades no han sido capaces de evaluar los
impactos ambientales, sociales y económicos que
los cultivos transgénicos están causando a
nuestro país y más específicamente los impactos
que estos podrían causar en el departamento de
Montevideo y en la Laguna de Rocha, este último,
lugar riquísimo por su biodiversidad y sus
recursos naturales.
Nueve países de la Unión Europea se han
decretado zonas libres de transgénicos. Uruguay
tiende a mirar a los países europeos como
ejemplo a seguir. ¿No será ésta una buena
oportunidad para decretar ambas zonas libres de
transgénicos?
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