Argentina
12 de junio
Día Mundial Contra el Trabajo
Infantil en la
Agricultura |
“Que
las ganas de Estudiar y Jugar
no se pierdan en el Surco”
El trabajo a temprana edad
refleja una cruda realidad de nuestro sector rural. Admitir
un paisaje de niñas y niños trabajadores es aceptar
conductas inapropiadas que alteran y condicionan el
desarrollo y crecimiento de nuestra condición humana. No
caben dudas que un niño es un individuo en formación, que
debe crecer jugando y educándose en un marco de
socialización con igualdad de oportunidades, que le permita
en su etapa adulta compartir esfuerzos y trabajo con
dignidad.
El trabajo infantil rural
signado por la ilegalidad, es negado por aquellos que
requieren de su mano de obra y muchas veces ejercido como
único recurso de supervivencia, consentido e impulsado casi
inocentemente por el entorno familiar de quienes lo padecen,
determinando un alto grado de naturalización e
invisibilidad, emergentes condicionantes a la hora de
establecer políticas públicas que mejoren su calidad de
vida.
Esta situación expresa las
vulnerabilidades en que se encuentra expuesta la infancia
rural, con niños y niñas que trabajan a la edad que otros
niños se educan y juegan en un escenario que invoca a la
constante naturalización e invisibilidad. Se trata de
comprender un complejo fenómeno cultural arraigado entre los
habitantes del campo y sus familias, que valoriza en forma
positiva el trabajo de los niños y niñas considerándolo como
un elemento formador de la personalidad.
Que los “niños aprendan
trabajando” no es una expresión casual, sino que forma parte
del lenguaje cotidiano a través del cual se refleja la
constante y sistemática imposición de conceptos culturales
que responden a un modelo social, político y económico
instalado.
Una concepción que puede
tener una explicación entendible desde el punto de vista del
hombre de trabajo, pero que también tiene un contenido
ideológico sustentado por los dueños de la tierra que
apuntan a tener una mano de obra trabajadora barata, sin
identidad laboral ni exigencias sindicales o sociales en el
presente, y una masa trabajadora con escasa formación
educativa y capacitación técnica como una cantera humana
inacabable, y con escasas posibilidades para defender
consistentemente sus derechos para el futuro.
El trabajo infantil,
prohibido por la legislación nacional vigente, por la
Convención sobre los Derechos del Niño y por los Convenios
de la OIT, produce deterioros físicos, psíquicos y sociales
en nuestros niños y niñas, cuestión determinante del futuro
proyecto de nación.
La igualdad de oportunidades
para la enseñanza con programas educativos flexibles y
complementarios entre áreas rurales y urbanas, y el
destierro de prácticas culturales que consideran al trabajo
infantil como una necesidad formadora de la personalidad,
son factores a tener en cuenta a la hora de combatir este
problema. El Derecho a la educación debe complementarse con
el derecho a la salud, al esparcimiento y a la participación
social y ciudadana en un sistema democrático.
Es determinante trabajar en
la construcción de una nueva realidad, que ponga fin a la
inequidad y desprotección de la infancia, estableciendo
valores de respeto y equidad que fortalezcan el genuino
desarrollo de capacidades, talentos y facultades de los
niños y niñas rurales.
Es principio fundante de la
Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE)
contribuir a la reflexión sobre este flagelo y así desterrar
la cultura de la desigualdad, porque cuando las actividades
o tareas que se denominan “de transmisión de cultura” violan
derechos dejan de ser culturales.
Instamos al trabajo conjunto
de la todos los actores sociales para la concreción de
cambios urgentes que se manifiesten sobre los principios
rectores de la Convención sobre los Derechos del Niño.
Jorge Abel Rodríguez
Secretario de Prensa,
Secretariado Nacional de UATRE
Responsable de CIPETRI*
Paola Pradé y Darío Lacuadra
Equipo Técnico de CIPETRI
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Los dueños de la tierra
apuntan a tener una mano de
obra trabajadora barata, sin
identidad laboral ni
exigencias sindicales o
sociales en el presente, y
una masa trabajadora con
escasa formación educativa y
capacitación técnica como
una cantera humana
inacabable, y con escasas
posibilidades para defender
consistentemente sus
derechos para el futuro. |
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* CIPETRI - Comisión Investigadora para la Erradicación del
Trabajo Rural Infantil
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