Uruguay

Se salvó CONAPROLE

Parmalat y Exxel

 

 

La creciente participación de las empresas transnacionales en el sector agroindustrial exportador uruguayo que se operó en los noventa no tuvo un éxito rotundo en el sector de productos lácteos por el fracaso de las negociaciones entre Conaprole y algunas empresas interesadas en comprarla o asociarse a ella, entre ellas el Grupo Exxel y la empresa Parmalat.

 

Si en 1999 alguna de esas dos empresas hubiera tenido éxito, probablemente la sociedad anónima sucesora de la cooperativa atravesaría una grave crisis, que arrastraría a toda la rama de actividad.

 

El Grupo Exxel está en plena disparada después de que los valores de varias de las firmas que compró en Argentina se desplomaron, sus empresas contrajeron deudas descontroladas y finalmente tuvo que liquidar como pudo a varias de ellas, algunas tan notorias como Musimundo y Fargo.

 

Juan Navarro, el uruguayo presidente del grupo inversor, fue considerado un modelo de empresario por prominentes políticos del gobierno vernáculo, en una época en que el mantenimiento del grado inversor y el atraso cambiario eran instrumentos decisivos para alcanzar el objetivo prioritario de atraer inversores extranjeros.

 

Como reacción a la propuesta de Exxel a Conaprole, también en 1999, Parmalat mostró su interés por la cooperativa, el cual concretó en una Propuesta de Asociación de cinco páginas, cada una de ellas rubricada. Si bien la propuesta fue considerada muy genérica por los directores de Conaprole, y finalmente desechada, dejaba claro que la nueva empresa sería controlada por Parmalat, ya que tendría el 51 por ciento del capital social y designaría a cuatro de los siete miembros del Consejo de Administración.

 

Años antes, en 1993, Parmalat compró Lactería, cuya capacidad de producción y gama de productos amplio posteriormente. En el último tiempo la transnacional italiana logró captar grandes productores de leche que remitían a Conaprole ofreciéndoles mayores precios, adoptando así un sesgo contrario a la lechería familiar. Por constaste, la cooperativa no diferencia los precios según el volumen de remisión.

 

A diferencia de Juan Navarro, Calisto Tanzi, el presidente de Parmalat, enfrentaba a finales de 2003 un juicio penal incómodamente instalado en una cárcel de Milán.

 

Mientras tanto Conaprole continúa operando, a pesar de los malos augurios de Ignacio de Posadas, quien en 1996, siendo senador,  señalo, que la cooperativa era una bomba de tiempo. Tres años después De Posadas formaría parte del equipo de Exxel que falló en el intento de tona de Conaprole.

 

 

Martín Buxedas 

Convenio Rel-UITA - Brecha

23 de enero de 2004

 

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