Standard Fruit organiza el apartheid antisindical
La Piñera Collin Street se
cree impune
|
Collin Street
Bakery es una compañía que produce piñas en gran escala y provee con ellas a
Standard Fruit. Desde hace algo más de un año sus trabajadores intentan
estabilizar un sindicato que es sistemáticamente perseguido por la empresa,
habituada a no respetar los derechos laborales y tampoco los derechos
humanos. Standard Fruit, no obstante, comercializa piñas de esta empresa
chupasangre y salvaje en el circuito de comercio justo gracias a varias
certificaciones internacionales. Los trabajadores de Collin, agrupados en el
SITAGAH, reclaman que la Standard tenga una responsabilidad social acorde a
esas certificaciones.
A pesar de la grave situación que viven los trabajadores de
la Compañía Piñera Collin Street Bakery afiliados al Sindicato de
Trabajadores Agrícolas, Ganaderos y Anexos de Heredia (SITAGAH), el
Ministerio de Trabajo y Seguridad Social se tomó un mes para convocar una
reunión entre sindicato, las dos empresas mencionadas y la propia secretaría
de Estado.
Sin embargo, el pasado miércoles 11, un día antes de la fecha
prevista para esa reunión, en un alarde de prepotencia y antisindicalismo
desembozados, Collin Street –proveedora de Standard Fruit Co.–
despidió al delegado sindical José Luis Martínez Chavarría, elegido por los
trabajadores no afiliados como su representante, como consta en el
Ministerio de Trabajo.
Como si esto fuese poco, tanto Collin Street como
Standard Fruit, asumiendo una actitud completamente irresponsable, se
negaron a asistir a la conciliación solicitada por el SITAGAH y citada por
el MTSS. Con el mismo desparpajo provocador fueron despedidos otros
trabajadores afiliados al sindicato. Este comportamiento es liderado por los
funcionarios de Collin Street Rafael Córdoba y Ricardo Rojas, el
primero enviado “en misión” por Standard Fruit Co. para encabezar la
persecución antisindical.
Esto confirma la actitud prepotente de Collin y
Standard Fruit Co., que hacen caso omiso de la institución
gubernamental, responsable de tutelar los derechos de los trabajadores y que
ha comprobado oficialmente sus graves violaciones al Código de Trabajo y los
Convenios de la OIT en materias de libertad sindical y negociación
colectiva.
Paradójicamente, Standard Fruit está cobijada por una
serie de certificaciones como SA8000, ISO14001, EUROGAP, entre otras. Para
obtenerlas, supuestamente se deben respetar los derechos laborales,
sindicales y ambientales. Sin embargo, Standard se ha negado
sistemáticamente a interceder ante su proveedora Collin Street para
que ésta cese su terrorismo antisindical, y ahora también se negó a asistir
a la convocatoria del Ministerio de Trabajo.
En la audiencia laboral se labró un acta en la cual quedó
establecido que “En vista de la negativa de las empresas a hacerse presentes
en la conciliación de fecha 8 de diciembre de 2005, el sindicato solicitó se
las convocara por segunda vez en los términos que establece el Código de
Trabajo, y para ese efecto solicitamos la intervención del Ministro y
Viceministro de Trabajo y Seguridad Social. De no hacerse presentes por
segunda vez las empresas convocadas, a saber, Standard Fruit Company
y Collin Street Bakery, esta última proveedora de la primera, según
lo establecido por ley presumiremos como ciertos los hechos de los cuales a
continuación se le acusan:
1. Amenazas de despido
contra todos los afiliados al sindicato.
2. Aislamiento de
todos los sindicalizados y de los que tienen amistad con los afiliados al
sindicato, con el fin de discriminar, hostigar y afectar psicológicamente a
los trabajadores sindicalizados.
3. Despidos
injustificados a trabajadores sindicalizados como Lester Quiñónez Mondragón,
Jaime Martínez Urbina, José Luis Martínez Chavarría y otros.
4. Llamadas de
atención injustificadas en forma masiva a los siguientes trabajadores: Juan
Manuel Franco M., José Luis Martínez, Esperanza López Cano, Isidro Flores
Molina, Narciso Duarte Picado, Javier Méndez Urbina, Lester Quiñónez
Mondragón, Samuel Rizo Acuña, Francisco Oporta Díaz, Juan Manuel Espinoza
Pineda y Margarito Pineda Calero. En estos casos la empresa no sólo ha
inventado causas para sancionar a los trabajadores sindicalizados sino que
les aplicó represalias como el no pago de los salarios devengados”.
En el acta, el SITAGAH dejó también constancia de su voluntad
de que ambas empresas sean citadas nuevamente por el Ministerio de Trabajo a
fin de iniciar una negociación seria y responsable.
Ante la gravedad de los hechos denunciados, el SITAGAH llama
a redoblar la campaña de solidaridad y presión internacional para que la
Standard Fruit acepte llevar a su proveedora Collin Street ante
la mesa de negociación.
Carlos Amorín
© Rel-UITA
26 de enero de 2006