La
cadena hotelera francesa Accor prevé alcanzar los 5.000
establecimientos hasta el 2010, tras alcanzar al cierre del
presente ejercicio más de 4.000 hoteles.
El gigante hotelero francés
Accor
anunció que espera aumentar su margen operativo en tres
puntos gracias a la puesta en marcha de lo que denomina su
'nuevo modelo económico', que entre otras cosas debe
traducirse en un aumento de su parque de establecimientos.
El grupo francés alcanzó en los nueve primeros
meses del año una facturación de 6.119 millones de euros, lo
que se traduce en un incremento del 8,5% con respecto al
mismo periodo del ejercicio anterior
La red de
hoteles, que estará compuesta por más de 4.000 a finales de
este año, debería llegar a 5.000 en el horizonte de 2010,
mientras que el número de habitaciones tendría que pasar a
600.000, según los planes precisados hoy por
Accor
en un comunicado.
La compañía
también prevé un incremento de la demanda en sus hoteles del
5,7% entre 2006 y 2012, una progresión superior a la del
mercado, estimada en el 3,7%.
Su estrategia para lograrlo pasa por
aumentar su cuota de mercado en Europa en los
establecimientos de gama media mediante 'una segmentación
más importante' de su oferta: a partir de las marcas
Suitehotel y Adagio junto a Novotel y Mercure.
Pretende
también aumentar su peso en Europa en el nivel
económico igualmente con una mayor segmentación de su oferta
en la marca All Seasons, y la apertura de nuevos hoteles
Etap en la gama de hoteles muy económicos.
En
Norteamérica plantea reforzar la posición de la cadena Motel
6 con su desarrollo con franquicias a partir de 'un nuevo
concepto de habitación y de edificio'.
Otra línea
de acción es incrementar su presencia en los países
emergentes en los que 'la demanda de productos
estandarizados está en fuerte crecimiento' con Ibis y
Novotel.
Por último,
busca segmentar a escala mundial sus marcas de gama alta
(Pullman) y de lujo (Sofitel) 'para responder a una demanda
de productos y servicios cada vez más diferenciados'.
Este año,
Accor
ha lanzado dos nuevas marcas, All Seasons en la categoría
económica no estandarizada y Pullman en la gama alta, al
tiempo que se esforzaba por colocar sus hoteles Sofitel en
la categoría de lujo.
El objetivo
general es 'cubrir el conjunto de los elementos de
clientela, de la categoría muy económica a la de lujo,
ofreciendo productos estandarizados y no estandarizados, en
respuesta a una demanda cada vez más fragmentada'.
La división hotelera registró unas ventas de 4.391 millones
de euros, un 8,4% más, dentro de la cual los
establecimientos de alta y media gama registraron la mayor
facturación y un crecimiento del 14,4% con respecto a los
nueve primeros meses de 2006