El Salvador

Trabajadores de Calvo eligen nueva
junta directiva en medio de amenazas

 

A un día del primer aniversario de la Seccional de Calvo Conservas del Sindicato General de Trabajadores de la Industria Pesquera y Actividades Conexas (SGTIPAC), el pasado domingo 3 de febrero se celebró su asamblea general ordinaria en la que eligió su nueva Junta Directiva para el período 2008 - 2009 y brindó a sus afiliados un informe de las labores realizadas durante el primer año de lucha sindical.

 

Conteo de Votos: Elección por voto secreto, libre y democrático en la
seccional del sindicato obrero, el SGTIPAC

 

La actividad estuvo marcada por una serie de acciones de desestabilización por parte de los gerentes de la empresa Calvo Conservas, quienes a través del sindicato patronal amenazaron con el despido a que quienes asistieran a la asamblea del SGTIPAC. A pesar de estas acciones, el SGTIPAC celebró exitosamente su asamblea gracias a la actitud valiente de decenas de trabajadoras y trabajadores, quienes se hicieron presentes en el Centro Obrero de El Tamarindo en La Unión. Allí eligieron a su nueva junta directiva y renovaron el compromiso de lucha en defensa de su sindicato, la dignidad y los Derechos Humanos.

 

Las amenazas fueron ejecutadas específicamente por jefes de Calvo y representantes del sindicato patronal, una organización que ha sido creada por los gerentes de la empresa para aparentar que existe libertad sindical, y para negociar un contrato colectivo de protección que según ellos creará a la empresa un blindaje de impunidad frente a las denuncias de los abusos que han trascendido nacional e internacionalmente.

 

Según testimonios de trabajadoras que se sumaron a la asamblea, el día 31 de enero de 2007, Cristela Vides, Jefa de Producción de Calvo Conservas, se subió a uno de los buses del transporte colectivo a decir que tenían instrucciones del Gerente de Recursos Humanos Eduardo Meléndez, que las personas que asistieran a la asamblea de SGTIPAC serían despedidas.

 

Asimismo, los choferes de los buses que transportan a las trabajadoras a las comunidades de Yayantique y Bendición de Dios, se dedicaron también entre el 31 de enero y el 1º de febrero a decir a los trabajadores que el mismo gerente de Recursos Humanos, Eduardo Meléndez, les había comunicado que dejarían de prestar el servicio de transporte a esa comunidad, porque iban a despedir a las personas originarias de allí. Según estas mismas trabajadoras, el empresario, José Gamaniel Ordoñez (quien presta los servicios de transporte a Calvo) fue el vocero de estas amenazas argumentando que las personas de esas comunidades son “corruptas y mal agradecidas” con Calvo dado que apoyan al sindicato obrero.

 

Las amenazas de despido a las trabajadoras también fueron secundadas al interior de la empresa por el director de planta Antonio Huezo (acusado de negligencia durante la intoxicación del 21 de diciembre); por el jefe de planta el venezolano Erasmo Suárez; el directivo del sindicato patronal José Leonidas Valladares y Nidia de Payan, jefa de laboratorio y secretaria general del sindicato patronal.

 

A pesar de estas acciones, la asamblea de SGTIPAC se desarrolló con toda normalidad, dándose una elección democrática, por voto secreto, donde se ratificó a la mayoría de directivos de la seccional, quedando conformada la directiva de la siguiente manera:  

 

Secretario General

   Mariano Alexander Guerrero Centeno

-  Secretaria de Organización y Estadísticas

   Yessenia Yamileth Pérez

-  Secretario de Conflictos

   José Antonio Valladares

-  Secretaria de Educación Prensa y Propaganda

   Rosario del Carmen Aguilera

-  Secretario de Finanzas

   David Alexander Soto

-  Secretario de Relaciones y Asistencia Social

   Rodolfo de Jesús Díaz

Secretaría de Actas y Acuerdos

   Paula Nereyda Granados

  

Esta nueva victoria obrera en contra del terror implementado por los jefes y gerentes de la empresa Calvo Conservas El Salvador, se enmarca en una larga lista de acciones internacionales de apoyo a la libertad sindical y los Derechos Humanos en La Unión. Solo unos días atrás, el 31 de enero de 2007 en una reunión sostenida en Guatemala entre la Federación Sindical de Trabajadores Salvadoreños del Sector Alimentos, Bebidas, Hoteles y Agroindustrias (FESTSSABHRA), la Unión General de Trabajadores de España (UGT) y la Confederación Sindical de Comisiones Obreras (CCOO), se acordó llevar ante el gobierno español el caso de las violaciones laborales en Calvo El Salvador. El gobierno español fija directrices a las empresas multinacionales españolas para que cumplan con la normativa de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). Esta reunión se llevó a cabo en el marco de la Conferencia contra la Impunidad de la Confederación Sindical Internacional (CSI) y de los Sindicatos Globales.

 

La empresa Calvo ya enfrenta quejas por violación a los derechos humanos y la libertad sindical, ante la Compañía Española de Financiación al Desarrollo COFIDES entidad que le prestó 52 millones de euros para instalar sus operaciones en El Salvador. COFIDES envío a principios de enero de 2008 una auditoria social a El Salvador y se espera conocer en breve los resultados de la misma.

 

Asimismo, Calvo también enfrenta una solicitud de congelamiento de un préstamo de 17 millones de euros aprobado por el Instituto Gallego de Promoción Económica IGAPE, para desarrollar un plan de negocios que le permitiría ingresar el atún a Estados Unidos desde El Salvador, usando el Tratado de Libre Comercio entre la República Dominicana y Centro América (CAFTA). IGAPE espera los resultados de la auditoría de COFIDES.

 

El pasado 21 de diciembre de 2007, se suscitó una intoxicación masiva en la planta de Calvo en La Unión. Una inspección del Ministerio de Trabajo y del Seguro Social de El Salvador, ordenó poner en práctica una serie de medidas en materia de seguridad e higiene ocupacional, luego de constatar las denuncias de las trabajadoras y del sindicato obrero.

 

Fuentes de las organizaciones sindicales salvadoreñas, no descartan presentar nuevas denuncias. Esta vez ante la OCDE con el apoyo de la UITA y de la Internacional de Trabajadores del Transporte (ITF), además de presentar un recurso bajo el capítulo laboral del CAFTA, dado el interés de Calvo de exportar atún hacía los Estados Unidos.  

 

La gerencia española de la empresa Calvo en El Salvador se aferra en no querer reconocer al sindicato obrero y negociar un contrato colectivo. Desarrolla una política antisindical en El Salvador, contradiciendo sus buenas prácticas en España y Brasil, donde están sus otras plantas y donde reconoce y dialoga sin problemas con los sindicatos.

Junta Directiva Electa para el período 2008-2009

 

Centro de Estudios y Apoyo Laboral (CEAL)

8 de febrero de 2008

 

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