La fábrica de helados de Nestlé ubicada en Santo Domingo abastece a todo el Caribe manteniendo un régimen de funcionamiento permanente, 24 horas al día los siete días de la semana. No obstante, ofrece a sus trabajadores y trabajadoras un incremento salarial que no alcanza para comprar una lata de leche en polvo. Otro ejemplo de la “responsabilidad social made in Nestlé”.

-¿Cómo está siendo el diálogo con la empresa?

-En el marco de las negociaciones que viene llevando adelante el Sindicato de Trabajadores de Nestlé Dominicana (SINTRANESTLED), el pasado 27 de julio, y a propuesta de la empresa, sostuvimos una reunión fuera del ámbito del Ministerio de Trabajo donde se discute el aspecto salarial del Convenio Colectivo vigente para el período junio 2006 a junio 2007. Como representación sindical entendíamos que las negociaciones habían producido un leve avance, pero para nuestro asombro la empresa no tomó ninguna de las propuestas sindicales, a saber, el 14 por ciento a los niveles 1,2,3,4 y 8 por ciento a los niveles 5,6 y 7, por lo que de nuevo las negociaciones continuaron el viernes 28 en la secretaría de Trabajo.

-¿Qué ocurrió entonces?

-Se mantuvo esa reunión en la que tampoco hubo avances con respecto a la posición de Nestlé, por lo que la Comisión Negociadora del Sindicato decidió terminar las negociaciones “en mediación”, como lo define la Ley. Hoy, lunes 31, mantendremos otra reunión con el Ministerio de Trabajo en la que plantearemos pasar a otras figuras jurídicas también previstas en el Código Laboral llamadas “arbitraje” y “auditoría”, ya que fue imposible llegar a un consenso.

-¿Cuál es la propuesta de Nestlé?

-Nosotros calificamos como “un descaro” la propuesta de incremento salarial de la empresa, ya que el aumento mensual ofrecido no alcanza para comprar una sola lata de leche de 2.800 gramos. De las tres plantas que Nestlé tiene en el país, los trabajadores de esta planta donde se producen helados son los que registran el nivel salarial más bajo en relación con las otras plantas (50 por ciento). Tampoco la transnacional brinda el servicio de transporte como ocurre en las otras dos fábricas, siendo que en Santo Domingo el transporte es más caro que en el interior del país. Aquí podemos hacer otra comparación, el aumento salarial que propone Nestlé no da ni siquiera para compensar el incremento en el costo del transporte.

Más que una propuesta, esto es una ofensa.

-¿A qué se debe esa intransigencia de Nestlé?

-A que, según ellos, se está operando a pérdida, cuando en realidad es una planta regional, que está produciendo para todo el Caribe funcionando las 24 horas del día durante los siete días de la semana. La empresa está haciendo grandes inversiones, por ejemplo, en nueva una planta de tratamiento. Nosotros estamos de acuerdo con esa política, pero se debe admitir que ella sólo es posible gracias a la rentabilidad de la planta.

-¿Qué tienen previsto en adelante?

-Citaremos a una asamblea general para informar al Sindicato de cuál es la situación, y también a una asamblea de la Federación para analizar los pasos a dar de manera conjunta con los demás sindicatos, donde no descartamos otras medidas contempladas en el código de trabajo.

Carlos Amorín © Rel-UITA 31 de julio de 2006

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