“Parmalat Brasil intentará mantener sus operaciones
solamente con los recursos obtenidos dentro del país
para sanear sus deudas”, expresó el presidente de la
empresa, Nelson Bastos, este lunes 7 de junio en
audiencia en la Asamblea Legislativa de Porto Alegre (RS).
Aunque todavía opera a mitad de su capacidad “Parmalat
Brasil ha vuelto a poner en operación sus nueve
fábricas en el país”, indicó el empresario.
Una de las mayores dificultades de la empresa está en
retomar la producción en Carazinho, donde la captación
diaria de leche cayó de 1,5 millón a 300 mil litros
diarios.
La última de las fábricas en volver a operar fue la de
Santa Helena, en el Estado de Goiás, mientras otra
fábrica en Río de Janeiro está intervenida por el
gobierno regional.
“La empresa está en camino de recuperarse. Hoy estamos
en el 50% de la producción respecto a la época
anterior al escándalo financiero de diciembre de
2003”, declaró Bastos, quien asumió el cargo en abril
tras ser designado por la matriz italiana para llevar
a cabo la reestructura de la empresa.
Por su parte, Siderlei Silva de Oliveira, presidente
de la Confederación Nacional de Trabajadores de las
Industrias de la Alimentación (CONTAC), quien
participó de la audiencia, expresó: "Bastos dice que
la empresa es nacional y que está en plena
recuperación".
Según el sindicalista, el ejecutivo habría informado
que la recuperación de la empresa se haría con
recursos generados en Brasil. "Todo va a depender de
los esfuerzos de
Parmalat en Brasil", expresó Oliveira.
Afirmó, asimismo, que el presidente de la compañía se
comprometió a mantener en funcionamiento todas las
plantas de
Parmalat en Brasil.
"No existe más aquella historia de cerrar plantas
deficitarias o reducir líneas de productos. La empresa
intentará mantener toda su línea de producción en
funcionamiento", dijo Oliveira.
Bastos habría dicho también en Porto Alegre que la
deuda de 500 millones de reales (unos 165 millones de
dólares) de la empresa es “manejable”.
"El empresario explicó que el plan de reestructuración
no puede privilegiar ningún acreedor. Por eso, los
productores de leche aún no recibieron todos sus
créditos", afirmó Oliveira.
Se estima que la deuda de la empresa con los
productores de Carazinho ronda los 9 millones de
reales.
Un contrato para exportar 1.200 toneladas por mes de
leche en polvo a Europa, válido hasta fin de año,
ayudó a la actual reactivación.
En mayo,
Parmalat Brasil facturó 39 millones de
reales, sin contar el resultado de la planta de
Batavia. Fue el mejor resultado obtenido por la
empresa desde que se descubriera la crisis financiera
mundial.
Rubén Yizmeyián
© Rel-UITA
8 de junio de 2004
