Claudia Espinoza trabaja realizando el control de calidad en
la fábrica de helados Trendy SA, empresa que produce
mercadería para la transnacional Unilever en el país. Hace
casi tres años –fecha que coincide con el inicio de su
maternidad–
viene sufriendo hostigamiento por parte de los mandos medios
de la compañía.
Luego de agotar todos los procedimientos legales de denuncia
de su situación laboral, recurrió al asesoramiento y apoyo
de la Confederación de Trabajadores de Empresas de la
Alimentación y Área Privada de Chile (CONTALAPCH),
afiliada a la UITA. Sirel dialogó con
Cijifredo Vera, presidente de la Confederación, quien
comentó la situación de la trabajadora “El hostigamiento
comenzó hace casi tres años, cuando Claudia Espinoza
quedó embarazada, la presión constante y la persecución a su
persona por parte de la jefatura de la empresa afectó su
salud, a grado tal que la han derivado al psiquiatra”
Consultado acerca de cómo llega este caso a su conocimiento,
Vera manifestó que, “luego que esta trabajadora
agotara todas las instancias de denuncia, incluida la
Inspección Provincial de Trabajo, ya desesperada, contactó a
un compañero que acercó el tema a la CONTALAPCH.
Desde entonces, venimos realizando el acompañamiento de la
situación, enviando notas tanto a la gerencia de la empresa
como a la Inspección de Trabajo para presionar por una
solución para la trabajadora, que además es madre de una
hija pequeña y que está con altos niveles de estrés laboral,
diagnosticados por un profesional”.
Claudia
Espinoza,
ha realizado todos los procedimientos a su alcance para
denunciar esta situación que evidencia no solamente acoso
laboral sino que además deja de manifiesto una intolerable
discriminación de género. Claudia es la única mujer
que desempeña tareas en esa fábrica, ubicada en la comarca
de San Bernardo, en el área metropolitana de la capital
Santiago de Chile.
El hostigamiento se manifiesta a través de maltrato
psicológico, todo lo que la trabajadora realiza es colocado
en tela de juicio, que nunca es positivo, lo que le ha
generado alto nivel de desequilibrio emocional. Para agravar
la situación, luego que Claudia presentara la
denuncia formal ante la Inspección de Trabajo, fue
trasladada de sector con el consecuente cambio de tareas
dentro de la fábrica, sin ser consultada, lo que reafirma la
persecución que viene sufriendo.
La CONTALAPCH, a través de Cijifredo Vera, ha
enviado notas denunciando el hostigamiento laboral sufrido
por esta trabajadora, a la gerencia de la fábrica, a las
autoridades de Trabajo y a la Coordinadora UITA Área
Privada. “La realidad es que la están presionando para que
renuncie y esto sin dudas se trata de discriminación.
Estamos aguardando una respuesta a nuestras denuncias, por
parte de los directivos para ver que pasos seguiremos,
teniendo en cuenta que la Inspección provincial no tomó
medidas para proteger a esta trabajadora, el siguiente paso
será llevar la denuncia a la Dirección Nacional de Trabajo,
además de realizar la denuncia pública de estos hechos”,
concluyó el dirigente sindical.
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