La cervecera
brasileña AmBev (filial de la belga InBev) acaba de anunciar que su utilidad
cayó 7,2 por ciento. De 483,3 millones de reales (238,8 millones de dólares) en
el segundo trimestre a 448,7 millones de reales (221,8 millones de dólares) en
igual período del año pasado.
Por su parte la
cervecera argentina Quilmes (controlada por AmBev y que también
opera en otros países sudamericanos) anunció un aumento interanual de 29,1 por
ciento en sus ganancias del primer semestre, como consecuencia de un aumento en
las ventas en Argentina, Bolivia y Uruguay. La compañía,
que tiene su sede en Luxemburgo, declaró que su utilidad neta después de
los impuestos fue de 100,2 millones de dólares en el semestre. Las ventas netas
en el período subieron 19 por ciento, llegando a 621,2 millones de dólares.