Cierra casi la mitad de las plantas

y se pierden cerca de mil empleos

El Presidente francés reclama una investigación judicial “sobre lo que verdaderamente ocurrió en esta compañía”

Esta semana el Tribunal de Comercio de Quimper comunicó su veredicto sobre la liquidación del Grupo Doux: tres plantas permanecerán cerradas y casi mil empleos serán suprimidos. El presidente François Hollande tomó cartas en el asunto.

El Tribunal de Quimper decidió avalar las ofertas por las plantas de Blancafort, Boynes, Laval, Sérent y Pleucadeuc. Las otras tres –Graincourt, La Vraie-Croix y Le Pontet- serán cerradas.

Se trata de adquisiciones “parciales” del sector fresco de Doux. Esto significa que además de los trabajadores y trabajadoras de las plantas cerradas, también quedará cesante personal de estas factorías ya que habría una reducción de personal.

Como consecuencia del fallo judicial, quedarán sin empleo 971 trabajadores sobre un total de 1.700.

Durante la semana, representantes de la Confederación Francesa Democrática del Trabajo (CFDT) se reunieron con el presidente François Hollande y el ministro del sector Agroalimentario, Guillaume Garot.

Durante el encuentro se abordaron tres puntos: esclarecer las verdaderas razones de la quiebra de Doux; crear una comisión de seguimiento de los trabajadores en la empresa y actuar anticipadamente sobre las consecuencias sociales del posible cierre del sector congelado y productos elaborados del Grupo.

Hollande comunicó públicamente su voluntad de “conocer toda la verdad sobre lo que pasó en Doux durante todos estos años”, y mencionó específicamente el “abandono, inversiones en el extranjero y captación de subvenciones. No hay ninguna duda de que hubo negligencias –afirmó–, abandono de plantas que debieron ser modernizadas, diálogo social que nunca existió, formación y capacitación que nunca se implementó. La sociedad quiere saber qué ocurrió y la justicia deberá poner transparencia en todo esto”, anunció.

Con respecto a los licenciados, el presidente de Francia aseguró que “El Estado asumirá sus responsabilidades para que ninguno de ellos quede fuera del camino”.

La CFDT se concentra ahora en la negociación que concierne a las plantas que permanecerán en funcionamiento, los planes de formación y retorno al empleo de los cesantes, la situación de aquellos trabajadores que no accedieron a ninguna capacitación por omisión de Doux, y en la reparación de las víctimas de enfermedades profesionales irreversibles, como las LER, a consecuencia de las pésimas condiciones de trabajo en Doux.

Asimismo, se plantea acordar un plan de jubilación especial para aquellos trabajadores de las plantas que continuarán abiertas y que están próximos al retiro, lo que permitiría dejar puestos libres que serían ocupados por parte de los despedidos.