Una
comitiva estadounidense llegó a Brasil para realizar
seguimiento de las investigaciones del asesinato de la
misionera Dorothy Stang. La familia Stang sigue la
investigación del crimen y las acciones adoptadas por el
gobierno y por la Justicia en relación con el caso.
Una comitiva estadounidense llegó a Brasil para realizar
seguimiento de las investigaciones del asesinato de la
misionera Dorothy Stang. Los integrantes de la delegación
son entre otros, el hermano de Dorothy, David Stang, el
abogado de la familia, Brent N. Rushford, el cónsul especial
de Washington, Jeffrey T. Hsu, y el abogado consultor del
caso en Washington, Blake Rushforth, que llegaron este
jueves 22, a Belem donde el proceso fue abierto.
"Ellos vienen a reclamar todas las medidas necesarias,
inclusive lo que fue manifestado en aquella carta divulgada
recientemente y van a entregar también una segunda carta al
presidente del Tribunal de Justicia de Pará, juez de
apelación Milton Nobre, que puntualiza reivindicaciones en
el área jurídica del desarrollo del proceso", afirmó el
abogado José Batista Afonso, de la Comisión Pastoral de la
Tierra, que también estará en la reunión.
La familia Stang sigue la investigación del crimen y las
acciones adoptadas por el gobierno y por la Justicia en
relación con el caso. En agosto la familia envió una carta
al presidente Luiz Inácio Lula da Silva. "Enseguida después
de la muerte de nuestra hermana, usted prometió al mundo
enfrentar la impunidad en Pará. Al mismo tiempo en que nos
sentimos reconfortados por escuchar su compromiso de
castigar a los asesinos de nuestra hermana y destinar
tierras a los sin tierra y a las áreas de conservación,
hemos visto muy pocas acciones concretas", dice un trecho de
la carta.
Según el abogado José Batista, en la reunión, las entidades
pretenden presionar al Tribunal de Justicia de Pará para
juzgar favorablemente el pedido de transferencia del proceso
de la comarca de Pacajá (PA) hacia la capital, Belém. Ellos
también piden que no haya juicio por separado para
pistoleros y mandantes del crimen, y que todos los
involucrados se sienten juntos en el banco de los acusados.
La comitiva se reúne este viernes 23, con representantes del
Instituto Brasileño de Medio Ambiente y de Recursos
Naturales Renovables (Ibama), Instituto Nacional de
Colonización y Reforma Agraria (Incra), Comisión Pastoral de
la Tierra y de pastorales ligadas a la Conferencia Nacional
de Obispos de Brasil (CNBB).
Además este viernes, la delegación irá al Tribunal de
Justicia de Pará donde se reúne con el presidente del
tribunal, juez de apelación Milton Nobre, y con el juez
responsable del proceso, Lucas do Carmo, para averiguar
sobre lo que viene siendo realizado para el juzgamiento de
los asesinos de la misionera. A la tarde, los integrantes de
la comitiva se reúnen con miembros del Ministerio Público
Federal.
La misionera estadounidense Dorothy Stang, 73 años, fue
asesinada en el municipio de Anapu (PA), el 12 de febrero de
2005. Dorothy vivió 40 años en Brasil, donde se naturalizó,
y se volvió conocida internacionalmente por su lucha por la
implementación de proyectos de desarrollo sustentable y por
denunciar la explotación ilegal de madera en la región de la
Amazonia, la escrituración ilegal de tierra y la violencia
contra campesinos de la región.
La principal línea de investigación de la policía
es que el asesinato de la misionera fue organizado por un
consorcio de hacendados influyentes y poderosos de la región
del Oeste paraense, que se sentían perjudicados con la
actuación de Dorothy Stang.
Actualmente, cinco acusados involucrados en el
asesinato de Dorothy Stang están presos en Belem. Son ellos
los dos pistoleros, Rayfran das Neves, que disparó los
tiros, y Clodoaldo Batista (Eduardo), que acompañaba a
Rayfran en el momento del crimen; el intermediario Amair
Feijoli da Cunha (Tato) y los dos hacendados acusados de ser
los mandantes del crimen, Vitalmiro Bastos de Moura (Bida) y
Regivaldo Pereira Galvão. Los hacendados ya presentaron un
pedido de habeas corpus en la Justicia paraense y en
el Superior Tribunal de Justicia (STJ) para responder al
proceso en libertad, pero los dos tribunales negaron los
pedidos.
El día 8 de junio, el STJ negó por unanimidad el pedido del
Procurador General de la República, Cláudio Fontelles, de
transferir al ámbito federal el proceso referente al
asesinato de la misionera estadounidense.
Según la Comisión Pastoral de la Tierra, a pesar
de todas las presiones realizadas después de la muerte de la
hermana Dorothy, el clima de violencia continúa en la región
y los apropiadores de tierras, madereros y hacendados
continúan intimidando y amenazando a los trabajadores.
La Comisión Pastoral
de la Tierra también afirma que la policía no ha inhibido
los abusos y vienen tratando a los trabajadores de la región
como "bandidos". La entidad revela que denunció
recientemente la acción de la policía, articulada y apoyada
por un hacendado influyente de la región, amenazando y
dejando presos a los trabajadores. La Comisión dice además
que el Incra tampoco consiguió viabilizar todas las demandas
y medidas anunciadas, después del asesinato de Dorothy Stang.
Adital
(Agencia Brasil y Comisión Pastoral de la
Tierra)
26 de
setiembre de 2005