España

CONTAG habla de la violencia

que sufren los campesinos en Brasil

El asesor de relaciones internacionales del sindicato agroalimentario brasileño CONTAG-CUT, Luis Vicente Facco, informó hoy en Madrid sobre la violencia que sufren los campesinos en su país en la lucha por la propiedad de las tierras.

 

En un encuentro con representantes de Comisiones Obreras (CCOO), Facco, acompañado por Ariel Celiberti, de la Secretaría Regional de la Unión Internacional de Trabajadores de la Agricultura y la Alimentación (UITA), expuso la "grave situación por la que atraviesan los trabajadores agrícolas en muchas zonas de Brasil".

 

Fuentes de CCOO explicaron a EFE que se calcula que "casi medio millón de personas viven en condiciones de esclavitud" en este país iberoamericano y a muchos de los que se "rebelan y exigen sus derechos se les asesina".

 

CONTAG-CUT, el sindicato rural más grande de América Latina, con 40 años de historia y que agrupa a 25 millones de trabajadores del campo, se encuentra en España para promocionar una campaña internacional contra la violencia que sufren los empleados rurales en Brasil, que proseguirán en Londres.

 

Los sindicalistas brasileños expusieron la situación de su país, en donde las grandes propiedades se encuentran en manos de terratenientes que no quieren ceder tierras a los campesinos, lo que genera una violencia muy importante, señalaron las fuentes de CCOO.

 

En el sindicato español subrayaron el hecho de que en los últimos meses se han producido 391 asesinatos, de los cuales sólo 66 casos han llegado a juicio y 40 de los asesinos, nunca los responsables de ordenar los ataques, fueron condenados.

 

CONTAG-CUT desarrolla en su país una campaña para conseguir que "el Gobierno de Lula da Silva impulse la lucha por conseguir tierras", pero "tienen muy difícil que se cumplan sus objetivos", añadieron

 

Los estados brasileños más afectados por esta violencia, según explicaron los sindicalistas, son Pará y Mato Grosso, en donde días pasados las autoridades del país liberaron a 1.200 trabajadores que vivían como esclavos en una hacienda agrícola, propiedad del hermano de un diputado.

 

Estos trabajadores, que servían en una planta de caña y una destilería, eran obligados a trabajar en condiciones infrahumanas para pagar las deudas contraídas en los almacenes de la propia hacienda.

 

La mayoría de los campesinos trabajaba en el corte de caña, sin ninguna garantía laboral legal y eran obligados a alojarse en tiendas improvisadas, en pésimas condiciones sanitarias y sin agua potable, señalaron los representantes sindicales brasileños.

 

A su juicio, "esto es sólo una pequeña muestra de la durísima realidad del trabajo agrícola en muchas partes de Brasil".

 

EFE

24 de junio de 2005

 

 

  UITA - Secretaría Regional Latinoamericana - Montevideo - Uruguay

Wilson Ferreira Aldunate 1229 / 201 - Tel. (598 2) 900 7473 -  902 1048 -  Fax 903 0905