"Las
`desapariciones` no son un problema exclusivamente
latinoamericano. Cientos de miles de personas han
`desaparecido` en Irak, Sri Lanka, la ex Yugoslavia y muchos
otros países", afirma Martin Macpherson, director de
Organizaciones Internacionales de Amnistía Internacional. El
comentario remarca la importancia de los encuentros
celebrados de hoy hasta 8 de octubre por la Organización de
las Naciones Unidas (ONU) sobre la cuestión de las
desapariciones en todo el planeta.
El grupo de
trabajo de la ONU se reúne esta semana, en Ginebra, con el
encargo de redactar un tratado internacional contra las
"desapariciones". En el proyecto del acuerdo divulgado
previamente se prevé puntos como: la tipificación de la
desaparición como delito en los países; asegurar el derecho
de la familia a saber la verdad sobre los desaparecidos; la
posibilidad de la familia accionar inmediatamente al Estado
en caso de la desaparición de alguno de sus miembros; el
derecho a la reparación integral y la punición para los
responsables, incluso extranjeros.
El tratado
concede, además, un papel destacado a la solidariedad
internacional. Según el documento preliminar, ningún país
puede extraditar una persona que corra el riesgo de
"desaparecer" en la nación de origen. Y los casos de
desaparición deben ser investigados por un órgano
internacional de vigilancia integrado por expertos, que
también cuidará del recibimiento de denuncias.
"Este tratado
proporcionará a los familiares de los `desaparecidos` un
instrumento legal concreto en su búsqueda de la verdad y la
justicia", explica Macpherson. Sin embargo, el representante
de la Amnistía Internacional advierte que muchos de los
dispositivos presentados en el tratado están amenazados de
no concretarse. "El proyecto del tratado contiene muchas
novedades. El peligro es que los Estados que se oponen a la
existencia de un tratado sobre `desapariciones` dejen sin
efecto algunas de ellas", señala.
ADITAL
5 de octubre de 2004