Uruguay

El fin de semana pasado han sucedido dos hechos de gran importancia en el hermano país de Uruguay.

Por una parte se ha roto el monopolio compartido de los dos partidos tradicionales, blancos y colorados, que durante los últimos años se habían convertido en un solo partido, partido en dos para alternarse en el poder. Algunas pocas diferencias en las palabras, intentaban tapar las muchas semejanzas en las ideas ya que responden a los mismos intereses.

El resultado de las elecciones dio como ganador al pueblo uruguayo que votó masivamente a un Frente por el que se siente representado. Trabajadores, campesinos, jóvenes, desocupados, gente que lleva muchos años peleando para construir otro modelo de país que no responda a las políticas neoliberales, son los verdaderos artífices de este frente y esta victoria. Y quienes han sido elegidos para los cargos del poder no deben olvidarlo, porque ese pueblo saldrá a reclamarles si no cumplen con sus expectativas.

Pero además ganó toda Nuestra América, porque esta victoria ratifica los cambios sociales y políticos que se están viviendo en el continente y que tienden al lograr una sociedad sin excluidos, sin desnutridos, sin analfabetos, mas justa y solidaria, con unidad en la diversidad, con otro nivel de conciencia ecológica y soberanía de los recursos naturales.

No será fácil lo que le espera al Frente Amplio - Encuentro Progresista - Nueva Mayoría, que deberá hacerse cargo de un país fundido, endeudado hasta lo impagable y sometido, como el resto de los países de Nuestra América a la dictadura financiera internacional. Pero contara con el apoyo de su pueblo y con el apoyo y solidaridad del resto de los pueblos latinoamericanos.

Por otra parte, también hubo en Uruguay un plebiscito en el que el pueblo salió masivamente a defender sus intereses. La gente ha confirmando, con su NO a la privatización de sus recursos acuíferos, que todos deben tener derecho al agua y no unos pocos privilegiados que puedan pagarla. Porque la sed del mundo va en rápido aumento y las reservas de agua serán tanto o más codiciadas que las de petróleo y si regalamos o vendemos generosamente nuestros recursos, en el futuro lo pagaremos demasiado caro.

Muchos de nuestros países, o todos, deberíamos ser capaces de tomar el ejemplo de Uruguay. Deberíamos obligar a nuestros gobernantes a que sometieran el tema del agua y demás privatizaciones al voto popular. Porque esta es una decisión que nos afectará en gran medida a nosotros, y a las generaciones futuras.

Desde EcoPortal saludamos la victoria del pueblo uruguayo y le enviamos nuestros mejores deseos de prosperidad.

AMBIENTE y SOCIEDAD

EcoPortal.net
4 de noviembre de 2004