Toronto (Canadá) - Las autoridades de Canadá temen que la
gripe aviar se haya propagado fuera de la zona de alto
riesgo de Columbia Británica, donde se han sacrificado
300.000 aves y han ordenado la cuarentena de una granja
fuera del área de control.
La orden de la Agencia de Inspección Alimentaria canadiense
(CFIA) se produce poco después de que se supiese que uno de
los empleados de esta oficina contrajo el virus de la gripe
aviar tras haber estado en contacto con aves muertas en una
granja del valle Fraser, en Columbia Británica.
La persona afectada mostró síntomas de conjuntivitis pero se
ha recuperado totalmente, indicó CFIA.
Precisamente hoy la Unión Europea anunció que permitiría de
nuevo la importación de productos avícolas de Estados Unidos
y Canadá, excepto los procedentes de Texas y Columbia
Británica, que habían estado prohibidos en Europa tras el
descubrimiento de casos de gripe aviar en febrero.
La agencia cree que las tasas de mortalidad mayores de lo
usual en una granja del valle Fraser fuera del radio de
cinco kilómetros establecido en torno a las diez granjas y
33 explotaciones menores afectadas por la gripe aviar en
febrero significa que el virus se ha propagado.
CFIA ha indicado que las pruebas iniciales señalan que la
granja podría estar afectada por una variante moderada de la
enfermedad de Newcastle, una dolencia que afecta a aves,
pero las pruebas no han podido descartar que los pollos
estén infectados con la gripe aviar.
La agencia informó el lunes de que hasta el momento hay seis
granjas dentro del radio de cinco kilómetros en torno a
Matsqui Prairie infectadas con el virus de la gripe aviar.