En
“algún lugar de Honduras”, el secretario general del
Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Bebida y
Similares (STIBYS), organización afiliada a la UITA, Carlos
Reyes pudo establecer contacto telefónico con Sirel. Lejos
de intimidarse por estar siendo buscado por las fuerzas
represivas, Carlos continúa participando en la resistencia a
la dictadura. Este fue el breve diálogo que pudimos
mantener.
-¿Cuál es
tu evaluación del momento que vive el país?
-El gobierno
de facto está argumentando a nivel internacional que esto no
es un golpe de Estado al estilo de cuando los militares
toman el poder y ocupan todas las instituciones. La realidad
es que se trata, sí, de un golpe de Estado de la oligarquía
ultraderechista, que desde el año pasado ha venido asaltando
primero la Corte Suprema de Justicia a través de sus
principales miembros, luego la Fiscalía del Estado, después
el Tribunal Supremo Electoral, más tarde el propio Ejército,
y lo último que le quedaba por asaltar era el Poder
Ejecutivo, que es lo que hizo ahora. Su justificación tiene
una contradicción insalvable, porque dicen que la
destitución del presidente José Manuel Zelaya se debe
a que éste violó la ley, pero
¿cómo es
posible que intenten resolver un supuesto crimen político
con una violación aún más grave a la ley?
-¿La
resistencia se sigue manifestando?
-Hay
movilizaciones en todo el país, no sólo en la capital.
Ayer nos detuvieron a cinco compañeros y
mataron a un compañero del Sindicato de Telecomunicaciones
al invadir con camiones el predio de esa institución.
También hay muchos heridos pero no podemos saber con
precisión cuántos son porque el Ejército controla los
hospitales.
-¿Cómo
fue el episodio en el que pudiste escapar de la Policía?
-Estábamos
en la manifestación de ayer cuando empezaron las escaramuzas
con la Policía que finalmente lanzó sobre nosotros a los
grupos antimotines. Comenzaron a golpear salvajemente a la
gente.
Allí fue cuando uno de estos
hombres me dio un golpe en una pierna y caí al suelo, y
cuando otro se me iba a tirar encima, uno de sus oficiales
que me reconoció ordenó que me dejaran ir.
Así fue como pude escapar, pero otros fueron detenidos.
Sabemos de muchos oficiales que están
desobedeciendo las órdenes de los jerarcas. Ayer en San
Pedro Sula los comandantes ordenaron a la Policía que tomara
la zona donde estaban manifestando los compañeros, pero la
tropa no obedeció la orden.
-¿Cómo
continuará vuestra lucha?
-Seguimos en
movilización permanente, cuidando los derechos del pueblo
hondureño, de los trabajadores, porque con este gobierno que pretenden instalar, encabezado
por Roberto Micheletti, se profundizará el neoliberalismo,
se va a una mayor privatización de los servicios públicos
que aún quedan por vender como el agua y la energía
eléctrica. Los derechos laborales serán definitivamente
arrasados. Por eso llamamos a
todos los pueblos de Latinoamérica a apoyar el movimiento de
resistencia.
Estamos,
además, muy agradecidos a la UITA que tiene acá a un
compañero como Giorgio Trucchi, que ha estado
pendiente de todo, ya lo hemos presentado a todos los
compañeros, así que la UITA está presente en esta
lucha.
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