Dirigentes de 64 organizaciones sindicales provenientes de doce países de
América Latina que participaron en el 3er Encuentro de la Federación
Latinoamericana de Trabajadores de Coca Cola (FELATRAC), enviaron una carta a
los presidentes de Argentina, Bolivia, Brasil, Ecuador, Paraguay, Nicaragua,
Uruguay y Venezuela apoyando su decisión de no reconocer el gobierno de Porfirio
Lobo ni aceptar el reintegro de Honduras a la Organización de Estados Americanos
(OEA).
En la misiva, los sindicalistas expresan que apenas pisaron
suelo hondureño fueron informados del asesinato de tres campesinos integrantes
del MUCA a manos de pistoleros pagados por los terratenientes del Bajo
Aguán, liderados por Miguel Facussé Barjum, quienes pretenden usurpar
esas tierras para establecer allí plantaciones de palma aceitera.
Señalan que sólo en los últimos meses esta persecución contra
los campesinos ha producido diez muertes violentas.
También reseñan la entrevista que mantuvieran con Berta
Oliva, coordinadora nacional del Comité de Familiares Detenidos
Desaparecidos en Honduras (COFADEH). “Según Oliva –dice la carta-,
durante los primeros seis meses del gobierno de Porfirio Lobo se han
registrado más de mil violaciones a los Derechos Humanos; ocho periodistas
fueron asesinados y se calcula que debieron exiliarse 127 personas. En ese
periodo se registró un 45 por ciento más de violaciones a los derechos humanos
que durante los siete meses del gobierno de facto de Roberto Micheletti”.
Los sindicalistas denuncian también haber comprobado la
brutal represión que sufrió una movilización del gremio magisterial que dejó a
cuatro personas hospitalizadas y diez detenidas.
Asimismo, expresan que cuentan “con un amplio dossier sobre
el hostigamiento sistemático que está padeciendo nuestra afiliada, el Sindicato
de Trabajadores de la Industria de la Bebida y Similares (STIBYS), cuyo
presidente, Carlos H. Reyes, integrante del Comité Ejecutivo Mundial de
la UITA, es uno de los mayores referentes en la lucha por la democracia
en Honduras”.
“Toda esta situación está siendo sistemáticamente silenciada
por los principales medios de comunicación locales -agrega la carta-, y es
ignorada por una buena parte de la comunidad internacional, que ha quitado a
Honduras de su agenda”.
Por último, los
sindicalistas expresan su firme y comprometido apoyo “a vuestra decisión
política de no reconocer al actual gobierno encabezado por Porfirio Lobo y de
rechazar el reingreso de Honduras a la Organización de Estados Americanos (OEA)”.