Ya se
registraron tres marchas, convocadas entre otros por el colectivo
Ta’ayush, en las que participaron desde varios cientos hasta tres mil
manifestantes. Realizaron también una protesta frente a la embajada de
Estados Unidos en Tel Aviv, y han convocado una marcha para el próximo
domingo a la que esperan asistan 10 mil personas.
“Acallar
los cañones y empezar a hablar”, es el lema que encabeza el manifiesto
de los pacifistas israelíes. “La ilusión de que un gobierno israelí
‘fuerte y firme’ puede determinar unilateralmente las fronteras y la
vida de Israel y de sus vecinos ha explotado en una sangrienta realidad.
De continuar eludiendo la vía de las negociaciones políticas sólo
podemos esperar, nosotros y nuestros vecinos, más caídos, heridos, más
destrucción, más miedos y una parálisis económica y social”, asegura el
texto. Señala que Ehud Barak interrumpió el proceso de paz con Siria y
prefirió una retirada unilateral del Líbano, sin negociaciones y sin
acuerdos, lo que le permitió a Israel quedarse con las alturas del Golán,
pero Hizbollá permaneció armado en su frontera norte. “Ahora estamos
pagando el precio”, dicen.
Sostienen
que la política de retirarse de algunos territorios sin negociación
permite al Estado de Israel consolidar “la ocupación y la colonización
en el resto” de los territorios ocupados. La parte final de la
convocatoria, firmada por la Coalición Contra la Guerra, apuesta a
resolver el conflicto a través de negociaciones y rechaza con vehemencia
la salida militar: “Ningún alambrado y ninguna muralla protegerán a
Israel de vecinos hostiles. El ejército israelí ha fracasado y seguirá
fracasando en sus batallas contra fuerzas guerrilleras. La superioridad
tecnológica y material permite seguir, detectar, destruir y eliminar
enemigos, pero no puede impedir continuas agresiones que causan bajas
entre los civiles y los soldados israelíes.
Tras
largos años de fracasados intentos militares por erradicar las fuerzas
guerrilleras en el Líbano, ¿cómo se les ocurre pensar que el actual
recurso a la fuerza va a solucionar algo? ¡¡¡En situaciones parecidas ya
estuvimos en el pasado!!!
La única
verdadera defensa, la única vía para garantizar un futuro diferente, un
futuro de paz y seguridad, es resolver los problemas que son la fuente
de la hostilidad, resolver el conflicto por medio de negociaciones, de
compromisos, terminando con la ocupación y estableciendo relaciones de
igualdad y respeto entre israelíes y palestinos y entre Israel y las
naciones vecinas.
¿Esto
suena como una locura? Es lo verdaderamente sano. Las locuras son el
sonido de las explosiones, el olor a quemado y los ríos de sangre. Suena
difícil. Lo es. Ya sabemos que las negociaciones no serán fáciles, que
el conflicto es complejo, que ambos lados tendrán que hacer grandes y
dolorosas concesiones. Pero, ¿alguien realmente piensa que hay
soluciones militares?”.
Convenio Brecha /
Rel-UITA
7 de agosto de 2006