Álvaro Uribe
fue reelecto presidente de Colombia al superar con una aplastante ventaja a
sus rivales en las elecciones de ayer, siendo el primer mandatario en
ejercicio en ser reelegido en ese país en más de 100 años.
Uribe aseguró
un segundo mandato en la primera vuelta de los comicios al conseguir el
62,23% de los votos sobre el 99% de las mesas escrutadas, logrando 7,2
millones de votos, seguido de Carlos Gaviria, del Polo Democrático, con 2,5
millones (22,03%).
´Hay que
anteponer en este momento el triunfo del presidente Uribe y la notificación
que le hacemos al país de que vamos a mantenernos como una fuerza opositora´,
dijo el candidato de izquierda Gaviria al reconocer el triunfo de su
oponente.
La votación
obtenida por Uribe es la mayor de un presidente en la historia del país y
supera los 5,8 millones de votos con los cuales ganó en 2002. La
Registraduría Nacional informó que la votación superará los 11,4 millones
con una abstención cercana al 56%, ligeramente superior a la de hace cuatro
años, en un país donde el voto no es obligatorio.
El postulante
del Partido Liberal, Horacio Serpa, reclamó garantías para ejercer la
oposición y aunque admitió la derrota, le pidió a Uribe ´recomponer el
rumbo´ para evitar una catástrofe.
Uribe se enteró
de su triunfo cuando estaba reunido con varios de sus ministros y los altos
mandos de la cúpula militar, dijo una fuente de la Casa de Nariño.
La registradora
del Estado Civil —responsable de las elecciones—, Alma Beatriz Rengijo,
señaló que la votación se realizó normalmente en los 32 departamentos
colombianos.
El ministro del
Interior, Sabas Pretelt, indicó que las elecciones se desarrollaron ´en
calma, a excepción de algunos hostigamientos´ atribuidos a las guerri- llas
y en los que se reportó la muerte de cinco rebeldes.
Mientras la
Organización de Estados Americanos (OEA) destacó la ´transparencia´ y la
´normalidad´ en que transcurrió la jornada electoral; un grupo armado ilegal
retuvo a 16 jurados electorales en una población del Pacífico, denunció
Julio Ibargüen, gobernador del departamento del Chocó. Los jurados fueron
liberados al final del día.
La mayor
guerrilla del país, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC),
anunció que no sabotearía los comicios e invitó a votar a los colombianos
por cualquier aspirante diferente de Uribe.
Uribe había
señalado antes del inicio de las elecciones que una vez se conociera su
triunfo propondrá negociar a la guerrilla de las FARC y responderá cualquier
gesto de paz de los rebeldes. ´Si gano la reelección voy a decirle a las
FARC que renuncie al terrorismo, que haga un alto en el camino y se proponga
ayudar a construir la paz y la reconciliación total´. Bogotá, EFE-AFP
Uribe, enemigo de la
guerrilla
Álvaro Uribe es
un político de derecha que gobierna con mano dura frente a la guerrilla,
consolidado como principal aliado de EEUU en una América Latina casi por
completo volcada a la izquierda.
Abogado
disidente del partido Liberal, este hacendado de 53 años posee un estilo
coloquial y directo —tachado de populista por los críticos— al que debe en
buena medida su aceptación del 70 por ciento en casi cuatro años de
gobierno.
Exige
resultados diarios en su cruzada contra las Fuerzas Armadas Revolucionarias
de Colombia (FARC). Durante su gobierno rodaron las cabezas de unos 30
generales.
Aliado
incondicional de Estados Unidos, Uribe hizo de la Seguridad Democrática el
eje de gobierno para doblegar a las FARC, la guerrilla que asesinó a su
padre en junio de 1983.
Aunque
reivindica su estirpe liberal, el ex senador, católico, casado con la
filósofa Lina Moreno y padre de dos hijos, es admirado por el partido
Conservador, que se adhirió al gobierno.
Uribe, quien
mantiene un idilio casi unánime con la prensa y al que la guerrilla tilda de
´narco-paramilitar´, es madrugador, se ejercita a diario, prefiere la
medicina tradicional y hace yoga. Es graduado con honores de un posgrado en
la Universidad de Harvard. Bogotá, AFP
Los retos del nuevo mandato
La derrota
militar o negociación con la guerrilla de las FARC, la deuda social con el
49,2% de pobres y la recuperación de la confianza de los países vecinos, son
los principales retos del reelecto presidente colombiano, álvaro Uribe.
Vicente
Torrijos, politólogo e internacionalista de la Universidad del Rosario,
consideró que Uribe, quien en la campaña de 2002 prometió derrotar a las
FARC, ahora tendrá que buscar un diálogo con el grupo guerrillero
manteniendo la mano dura. ´Uribe tendrá que replantear la política de
seguridad. Es muy importante destrabar el problema del intercambio
humanitario que está clausurado y tratar de aproximar a las FARC a un
esquema de negociación con el apoyo de los países amigos´.
La inversión
social es el otro frente de trabajo que debe encarar Uribe. ´El Presidente
tendrá que hacer un gran esfuerzo para reactivar a los sectores más
deprimidos, a fin de que se vinculen a un verdadero modelo de desarrollo´,
señaló Torrijos.
En las
relaciones internacionales, los analistas concuerdan en que el Mandatario
debe esforzarse en recuperar la confianza de los vecinos, menoscabada por su
alineamiento con Washington y el Tratado de Libre Comercio con Estados
Unidos. Bogotá, AFP
Resultados finales
Álvaro
Uribe •
El candidato del movimiento Primero Colombia logró el 62,23%.
Carlos
Gaviria •
El izquierdista Polo Democrático Alternativo consiguió el 22,03%.
Horacio
Serpa •
Desplazado al tercer lugar, el Partido Liberal sumó el 11,82%.
Antanas Mockus • El Movimiento Alianza Social Indígena obtuvo el
1,24%
La Razón
29 de mayo
de 2006