Las autoridades porteñas han recibido 2.702 denuncias
sobre confección ilegal desde enero de 2006
Varias reconocidas marcas de ropa deportiva fueron denunciadas a fines de la
semana pasada por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, quien a través
de la Procuración General las acusó de utilizar mano de obra esclava para la
confección de sus productos. Asimismo, a la denuncia se sumó el lunes la
Defensoría del Pueblo porteña, que condujo su propia investigación sobre el
caso en base a información aportada por la Unión de Trabajadores Costureros.
La denuncia acusa a las empresas Puma, Fila, Arena, Bensimon, Topper y Le
Coq Sportif de haberse beneficiado de la utilización de talleres
clandestinos, en los que se obligaba a los trabajadores a cumplir jornadas
laborales cercanas a las 15 horas, pagándose a cambio ínfimas cantidades.
Según informa el diario argentino Página/12, en los talleres se empleaba a
inmigrantes indocumentados, procedentes de Bolivia y Perú.
La denuncia implica también a la fábrica Delos S.A., ya que sería ésta la
que operaba con los talleres irregulares que producían para las grandes
marcas. Según las autoridades porteñas, las actuaciones comenzaron el pasado
marzo, cuando se inspeccionaron los talleres subcontratados por esta empresa
y se constataron diversas violaciones a las normas de seguridad e higiene, y
a la legislación laboral.
En conferencia de prensa el ministro de Producción de la Ciudad, Enrique
Rodríguez, expresó que estaba “comprobado que las grandes marcas se
benefician con la producción de trabajo esclavo”, y agregó que aún son
muchos los talleres que utilizan este tipo de régimen con sus empleados.
Asimismo, Rodríguez afirmó que se está intentando “crear una
cooperativa donde podrán reubicarse todos los operarios de talleres
clandestinos que van quedando sin trabajo”, e insistió en que debía
avanzarse en la implementación de políticas laborales comunes a los estados
miembro del MERCOSUR, en las que se establecieran contratos de
trabajo adecuados.
Anteriormente, el gobierno bonaerense ya había denunciado a otras marcas
–entre las que se encuentran Kosiuko, Cheeky y Soho- por motivos similares.
Además, desde enero de 2006 hasta la actualidad, las autoridades porteñas
han recibido 2702 denuncias sobre confección ilegal de prendas de vestir.
Radio Mundo Real
1 de agosto de 2007
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