España
El talón de Aquiles
del mercado laboral español
La tasa de
temporalidad es muy elevada y se resiste a bajar, incluso en
las mejores circunstancias económicas
|
En
los últimos siete años (desde 1998, un año después de la
firma del Acuerdo Interconfederal para la Estabilidad del
Empleo), se ha reducido sólo 0,6 puntos, situándose en el
31,8%. Esta reducción ha sido tan escasa porque el empleo
temporal no ha dejado de crecer: un 35% desde 1998 hasta
2004. No existen razones derivadas de la estructura
económica que expliquen la elevada tasa de temporalidad en
España. La temporalidad obedece básicamente a una errónea
cultura empresarial de contratación, pero no se trata en
absoluto de una práctica necesaria ni ajustada a las
necesidades económicas.
La temporalidad en España
casi triplica la de la UE
España es el país de la UE con mayor número de trabajadores
temporales: trabajan el 26% de los asalariados temporales de
la zona euro, y en cambio sólo aporta el 7% de la ocupación
total de la zona. La tasa de temporalidad en España alcanza
el 32,5%, mientras que en la UE, tanto de los 25 como de los
15, la media se sitúa en el 12,8%. En los últimos años, la
tasa de temporalidad en la UE disminuyó 0,8%, mientras que
en España, al tiempo, se elevaba 2,2%.
Fuertes diferencias por
CCAA
Todas las Comunidades Autónomas superan la media europea de
temporalidad (13%); la que menos, en 8 puntos porcentuales
(Cataluña), y las 4 que más, la triplican (Andalucía,
Extremadura, Murcia y Canarias). La temporalidad se ceba en
las Comunidades Autónomas más pobres. Todo el sur peninsular
supera el 35% de temporalidad y eso pese tener una mayor
presencia de empleo público.
El contrato temporal no
es necesariamente
un paso previo al
contrato indefinido
En España, el empleo temporal perdura más allá de la juventud
con mayor frecuencia que en la UE. Es decir, no se utiliza
en esencia como un paso previo al contrato indefinido para
edades jóvenes, como ocurre en Europa, sino como una pauta
de contratación cada vez más generalizada. El 76% de los
trabajadores temporales en España son mayores de 25 años,
mientras que en la UE apenas llega al 64%. En los últimos
siete años se aprecia un aumento en cuatro puntos de la
temporalidad en el tramo de edad comprendido entre los 40 y
los 50 años.
La temporalidad es mayor
entre las mujeres
y aumenta la distancia
con los hombres
La tasa de temporalidad femenina es 5 puntos mayor que la
masculina. En los últimos ocho años el número de asalariadas
temporales ha crecido un 57%, frente a un 21% en los
hombres. El 62% de los nuevos contratos temporales netos ha
ido a parar a mujeres.
A menor edad, más
contratación temporal
El 65% de los asalariados temporales menores de 25 años
poseen un contrato temporal, porcentaje que alcanza el 83%
para los que tienen entre 16 y 19 años. La temporalidad en
los menores de 30 es del 53%, frente a una media del 24%
para los que poseen más de esa edad. En los últimos siete
años, sin embargo, se ha reducido algo la tasa de
temporalidad en los tramos más jóvenes de edad (7 puntos
para los menores de 30 años), mientras que se ha elevado en
los tramos centrales de ocupación (más de 2 puntos para los
mayores de 30).
El sector público está
copiando los patrones
de contratación temporal
del sector privado
Se ha reducido la distancia de temporalidad entre sector
público y privado en siete puntos desde 1998. Desde
entonces, la temporalidad en el sector público ha aumentado
más de 4 puntos, hasta el 23%, mientras que se ha reducido
2,4 puntos en el sector privado, hasta el 34,7%. El número
de trabajadores del sector público con contrato temporal
aumentó un 50% en los últimos siete años. En el sector
público, que ocupa a la cuarta parte de las asalariadas, y
sólo al 16% de los hombres, la tasa de temporalidad femenina
también es muy superior a la masculina: 28,5% frente al 17%.
Grandes diferencias en la
tasa de temporalidad
por sectores de actividad
Existe una fuerte disparidad de la temporalidad por rama
económica, dentro de un nivel general muy elevado (en todas
duplica, como mínimo, la media correspondiente en la UE. 3
ramas de actividad agrupan al 40% de los trabajadores
temporales en España: construcción, industria manufacturera
y comercio. Las mayores tasas se dan en agricultura y
ganadería (64%), construcción y servicio doméstico (58%
ambas); las menores, en intermediación financiera (2,7%),
energía (12,7%) y Administración Pública (23%). El empleo
temporal de las mujeres se concentra en determinados
sectores de actividad, en los que además tienen una mayor
tasa de actividad, como el servicio doméstico (donde el 97%
de los asalariados son mujeres), el comercio, los servicios
sociales y la hostelería. En los hombres, tan sólo la
construcción y la industria manufacturera acumulan el 53% de
los trabajadores temporales.
A menor nivel educativo,
más temporalidad
A medida que aumenta el nivel formativo, disminuye la
temporalidad, si bien no garantiza un acceso más directo al
trabajo indefinido. En España la temporalidad es mayor
cuanto menores son los requerimientos de cualificación del
puesto de trabajo, mientras que en Europa afecta en términos
muy similares a todas los grados profesionales.
Si no disminuyen el
número de contratos temporales, al actual ritmo de creación
de empleo costaría 40 años alcanzar la media europea
Aún suponiendo que el número de asalariados con contrato
temporal se mantuviera estable, y con un ritmo de
crecimiento de asalariados del 2,5% anual (todos ellos
indefinidos), habría que esperar unos 40 años para igualar
la temporalidad a los niveles de Europa. Casi la cuarta
parte de los temporales llevan más tiempo en su puesto de
trabajo que la duración de su último contrato, lo que
significa que están sufriendo el encadenamiento de distintos
contratos temporales. Reducir la temporalidad exige
convertir empleos temporales en fijos, al mismo tiempo que
se crea nuevo empleo estable.
UGT
18 de mayo
de 2005
|