Un estudio
de la
Universidad Nacional (UNA) en Costa Rica*, detectó que mujeres
indígenas de ese país expuestas a pesticidas sintéticos en las
plantaciones donde trabajan, muestran una mayor incidencia de
problemas respiratorios.
Los investigadores
analizaron la presencia de síntomas respiratorios en mujeres que
trabajaban en el cultivo de plátanos y que eran habitantes del
territorio indígena Talamanca Bribri, en la costa caribeña de
Costa Rica.
A través de
encuestas y pruebas de función respiratoria (espirometría), se
comparó a 69 mujeres expuestas a herbicidas y a insecticidas
organofosforados con 58 mujeres que trabajaban en plantaciones
orgánicas.
El 81 por ciento de las mujeres del
primer grupo debía aplicar o manipular semanalmente el insecticida
clorpirifos y mensualmente el terbufos en plantaciones de plátanos.
Un grupo menor aplicaba el herbicida paraquat, el segundo más
empleado en el mundo después del glifosato.
En estas labores
las mujeres no usaban equipamiento como protectores respiratorios o
guantes, y la mayoría continuaba trabajando en el campo mientras
otras personas aplicaban pesticidas.
El estudio detectó
que entre estas mujeres, el 20 por ciento presentaba sibilancias
(sonido que se considera como síntoma de congestión de las vías
respiratorias), mientras que en el grupo de mujeres no expuestas, el
nueve por ciento presentaba este síntoma.
Entre las expuestas
a pesticidas, el 36 por
ciento despertaba en la noche por falta de aire, cifra que llegó a
26 por ciento entre las no expuestas. La presencia de tos crónica y
asma fue similar en ambos grupos.
La investigadora
Berna van Wendel, del Instituto Regional de Estudios en
Sustancias Tóxicas de la UNA, dijo a SciDev.Net que a partir
de sus hallazgos, proponen "buscar alternativas menos tóxicas o no
tóxicas, como las alternativas orgánicas".
Además, en junio
iniciarán experiencias participativas con las mujeres tendientes a
entregarles más información, cambiar a plaguicidas menos tóxicos y
adoptar formas de aplicación más efectivas y que generen menos
exposición.
También se
promoverá un manejo integrado de plagas, pues ahora "ellas toman la
decisión de aplicar pesticidas según criterios no basados en la
existencia de la plaga", dice la investigadora.
Tomado de
Biodiversidadla
13 de mayo de 2009
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