Perú 

  Galería Fotográfica  

Reclamo ante el Congreso de la República

Mujeres indígenas amazónicas exigen políticas públicas que atiendan sus derechos

       

Históricamente excluidas de toda política pública, las mujeres amazónicas presentaron ante el Poder Legislativo peruano los problemas prioritarios que enfrentan referidos al ejercicio de sus derechos al territorio, la salud, la educación, la justicia, la violencia, la economía y la infraestructura. El Estado y la sociedad peruana deben responder a sus demandas desde un enfoque intercultural.

 

Las lideresas amazónicas, ataviadas con sus trajes típicos y acompañadas por los lideres de sus comunidades, que llegaron a la capital peruana desde la selva central del Perú con el apoyo del Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán,

 

Mujeres Ashaninkas y Nomatsiguengas de la Selva Central, mujeres Awajun del Alto Marañon representantes de poblaciones históricamente excluidas del ejercicio de sus derechos individuales y colectivos, presentaron sus demandas y propuestas al Congreso de la República del Perú en la Audiencia Pública “Situación de las Mujeres Indígenas Amazónicas y propuestas de cambios elaboradas por las mujeres”.

 

Según Ivonne Macassi, coordinadora del Programa de Derechos Humanos de la Mujer del Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán, “Para los pueblos indígenas el territorio es fundamental, por eso las mujeres se preocupan por su conservación y defensa, y demandan una adecuada aplicación de las normas nacionales e internacionales, principalmente del Convenio 169 de la OIT”.

 

El muro de la educación

 

“La falta de acceso a la educación es otro problema gravitante en la Amazonia, donde la tasa de analfabetismo femenino fluctúa entre el 76,3 por ciento para la población Nomatsiguenga, el 54,2 por ciento para la Ashaninka, 38,4 por ciento en la Kakinte y 73,9 por ciento en el caso de la Awajun. A ello hay que sumarle las fuertes debilidades del sistema educativo nacional y la falta de una política intercultural adecuada para atender las demandas de las poblaciones indígenas”, detalló Macassi.

Para los pueblos indígenas el territorio es fundamental, por eso las mujeres se preocupan por su conservación y defensa, y demandan una adecuada aplicación de las normas nacionales e internacionales, principalmente del Convenio 169 de la OIT

 

El Convenio 169, suscrito y ratificado por el Congreso Peruano hace 17 años, contiene los concepto básicos de respeto y participación de las comunidades nativas y  postula: “el respeto de las culturas, formas de vida e instituciones tradicionales de los pueblos indígenas, y la consulta y participación efectiva de estos pueblos en las decisiones que los afectan”.

 

“Siempre hemos sido excluidas y discriminadas. Tenemos derecho a una atención intercultural bilingüe como lo establece el convenio 169 de la OIT, pero el personal del sector salud y los profesores, en su mayoría, sólo hablan castellano”, denunció en la Audiencia Pública Maritza Casancho Rodriguez, comunera del Sector Casancho de la Comunidad San Ramón de Pangoa, ubicada en la parte sur-este  del departamento de Junín.

 

Ante esta problemática las mujeres demandaron la implementación de una educación intercultural bilingüe que ponga fin al racismo y la exclusión que siguen caracterizando al país, y la realización de campañas de alfabetización para las mujeres adultas en las comunidades, en coordinación con los sectores de Educación, Salud y el Ministerio de la Mujer, entre otras acciones.

 

Un genocidio silencioso

 

La exclusión también se expresa en los sistemas de salud. Casi la mitad (49,9 por ciento) de las comunidades indígenas cuenta con algún tipo de establecimiento de salud, pero sólo el 45,5 por ciento de ellos tiene botiquines adecuados para atender emergencias. La mitad de los decesos ocurren antes de los 42 años, siendo que el promedio nacional de vida es de 62 años.

 

Para enfrentar esta dramática situación, las Mujeres Indígenas exigen el incremento de recursos de salud para sus comunidades, campañas de promoción de los derechos sexuales y reproductivos, la incorporación de la medicina tradicional dentro del sistema de salud, la sensibilización y capacitación del personal de salud para brindar una atención con calidad y calidez en el marco del convenio 169 de la OIT.

 

Al dirigirse al auditorio -compuesto por representantes de instituciones y organizaciones de mujeres, representantes de Ministerios y organizaciones del Estado-, Claudia Alegría Potsoteni, secretaria de Economía de la Federación Regional de Mujeres Ashaninkas, Nomatsiguengas y Kakintes (FREMANK), miembro de la Comunidad San Miguel de Otica, demandó la capacitación y sensibilización de su comunidad para enfrentar la violencia familiar.

 

Violencia intrafamiliar y narcopoderes

 

“Pedimos la capacitación de toda la comunidad: mujeres, hombres, adolescentes, niñas y niños sobre los derechos de las mujeres y sobre el grave problema que significa la violencia. Las autoridades y los jefes también deben ser sensibilizados, y en su caso, además deben ser capacitados sobre las leyes y acuerdos nacionales e internacionales para que puedan aplicar bien la justicia. Nosotras no luchamos en contra de nuestros compañeros hombres, lo que queremos es equidad e igualdad de oportunidades”, explicó la dirigente amazónica.

 

Según el Centro de Emergencia Mujer de Satipo, entre enero y octubre de 2010 se recibieron 314 denuncias de violencia familiar y sexual, pero es muy grave que los funcionarios que atienden este servicio no conozcan las lenguas nativas, a lo que se suma que los enfoques de atención no incorporan la diversidad y la cosmovisión de la mujer amazónica sobre la violencia y la injusticia.

 

Sobre los efectos del conflicto armado que afectó al Perú entre la década de los 80 y 2000, tema del cual se habla poco, Johnatan Sharete Quinchoker, presidente de la Organización Campa Ashaninka del río Ene (OCARE) expresó su preocupación por las víctimas de la violencia política y exigió que sean beneficiarios del Plan Integral de Reparaciones.

Durante la década de los 80 los terroristas llegaron a nuestra comunidad y se llevaron a muchos jóvenes causando gran dolor a las madres que sufrieron por su partida. Nosotros no queremos violencia, pero ahora el narcotráfico es un gran problema porque crece día a día

 

“Durante la década de los 80 los terroristas llegaron a nuestra comunidad y se llevaron a muchos jóvenes causando gran dolor a las madres que sufrieron por su partida. Nosotros no queremos violencia, pero ahora el narcotráfico es un gran problema porque crece día a día. Las mujeres indígenas temen por sus hijos, porque pueden ser captados o secuestrados para que trabajen en los cultivos de coca”, explicó.

 

En plena Selva Central, en la zona del Valle del río Apurímac y Ene, colindante con los territorios asháninkas, subsisten los últimos baluartes de Sendero Luminoso en alianza con grupos de narcotraficantes.

 

Se estima que en la zona hay unas 17.000 hectáreas de hoja de coca que producen anualmente 160 toneladas de cocaína, según la Oficina Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (ONUDD).

 

Por su parte, David Juan Chanqueti Chumpate, jefe de la Comunidad Alto Kiatari, ubicada en el distrito de Pangoa, provincia de Satipo, señaló que el gobierno de turno no presta atención a las comunidades indígenas del país, sin embargo, “Me siento contento porque por primera vez hay una reunión interétnica en el Congreso de la República para presentar las propuestas de las mujeres”, afirmó.

 

La audiencia pública se desarrolló el 29 de abril, en el marco del Proyecto “Acciones para Promover el Ejercicio de los Derechos Humanos de las Mujeres Indígenas Amazónicas en la Provincia de Satipo (Junín)”, implementado por el Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán con el apoyo de la Cruz Roja Española.

 

 

En Lima, Julia Vicuña Yacarine

Rel-UITA

13 de mayo de 2011

 

 

 

 

Foto: Julia Vicuña Yacarine

 

 Volver a Portada

   

  UITA - Secretaría Regional Latinoamericana - Montevideo - Uruguay

Wilson Ferreira Aldunate 1229 / 201 - Tel. (598 2) 900 7473 -  902 1048 -  Fax 903 0905