La celebración del día 8 de marzo como una jornada especial de lucha laboral se originó en los Estados Unidos en 1857, cuando las trabajadoras textiles y de la vestimenta manifestaron en favor de sus derechos el 8 de marzo de 1857 en la zona sudeste (Lower East Side) de la Ciudad de Nueva York. A nivel internacional, esta jornada fue lanzada en 1910 en la 2ª Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas en Copenhague y millones de trabajadores/as la celebraron por primera vez en 1911 en Austria, Dinamarca, Alemania y Suiza.

Este año, en ocasión del Día Internacional de la Mujer, el movimiento laboral tiene la oportunidad de expresar su constante dedicación en pro de la igualdad, demostrando su solidaridad con el sindicato en lucha en la planta de entremeses Frito-Lay de PepsiCo en Grodziesk, Polonia. El 8 de marzo, el sindicato llevará a cabo una manifestación en las puertas de la corte de Varsovia donde tiene su curso el proceso legal del pleito de 8 trabajadoras perseguidas, todas ellas miembros sindicales.

Estas mujeres, víctimas o testigos de acoso sexual por parte de un supervisor de la planta, fueron despedidas o bien obligadas bajo presión a renunciar a fines de diciembre del 2004. Cuando las mujeres, con el respaldo del sindicato, entablaron reclamaciones por acoso sexual contra la compañía en enero de 2005, la compañía lanzó una intensa serie de ataques contra la organización sindical que ha procurado defenderlas, la Secretaría de la Alimentación de NSSZ Solidarnosc. El dirigente sindical local, Slawomir Zagrajek, fue despedido el 14 de diciembre del año pasado como reacción a una crítica contra el sindicato en el periódico "Super Express", el cual adujo que el sindicato tiene menos miembros que los que afirma y que por lo tanto, el presidente se beneficiaba ilegalmente de su salario como un directivo sindical a tiempo completo. A raíz del clima antisindical existente en la planta, donde la gerencia se negó durante años a negociar una renovación del convenio colectivo y donde prevalece un ambiente de temores, el sindicato ha cobrado regularmente las cuotas en lugar de depender del sistema de descuento de las cuotas sindicales por parte del empleador. La gerencia respondió inmediatamente al artículo del periódico, llamando un equipo para tomar declaraciones a todos los empleados con el fin de confirmar su afiliación al sindicato. Aunque las declaraciones no han sido puestas a disposición de los representantes sindicales (quienes impugnaron el procedimiento debido a que es ilegal y está destinado a intimidar a los/as trabajadores/as), la compañía adujo que los resultados son consistentes con los "hallazgos" de la nota del periódico y despidió de forma expedita a Zagrajek.

Tras el despido del presidente del sindicato y la intimidación colectiva a los miembros de la planta, se emprendió una nueva agresión antisindical el 13 de enero, cuando la gerencia distribuyó una carta a todos los empleados, expresando su renuncia al sindicato. La carta concluye expresando "que es mi voluntad renunciar a mi calidad de miembro del sindicato a partir del día de hoy". Se aleccionó a los/as empleados/as a firmar las cartas en presencia de testigos y devolverlas en el plazo de 5 días al comité sindical.

La oportunidad de los últimos ataques sugiere que PepsiCo está decidida a desmantelar la base de efectivos del sindicato en Frito-Lay, inmediatamente después de su adquisición a principios de este año de Star Foods, el principal productor de entremeses salados de Polonia. Las elecciones a nivel de planta de los representantes sindicales (que se efectúan cada 4 años) deben tener lugar este año entre enero y marzo.

La gerencia de la planta local ha rechazado todas las solicitudes del sindicato para negociar el despido de las mujeres y del presidente sindical, así como la intimidación colectiva de los/as empleados/as y los miembros del sindicato. Confrontada con las violaciones a los derechos básicos por parte de su gerencia en Grodziesk, la sede central corporativa de PepsiCo emite escuetamente declaraciones impasibles afirmando su política de "tolerancia cero" respecto al acoso sexual y su compromiso con la "responsabilidad social empresarial". Las autoridades del gobierno polaco, por su parte, se han rehusado hasta ahora a reaccionar ante estas violaciones graves al derecho nacional, de la UE e internacional.

Se ha presentado actualmente una queja formal contra el gobierno de Polonia ante el Comité de Libertad Sindical de la OIT. La UITA está preparando una demanda contra la compañía por su violación de las Directivas para las Compañías Multinacionales de la OCDE, pero estos procesos insumen tiempo.

Por lo tanto, es fundamental ejercer una renovada presión contra la compañía, especialmente a partir de este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer.

¿Qué puedes hacer?

●   Enviar un mensaje de solidaridad y apoyo a la manifestación sindical del día 8 de marzo a spspoz@poczta.onet.pl

●    Remitir un mensaje a las oficinas centrales corporativas de PepsiCo condenando la negativa de la compañía matriz a actuar en respuesta a las crecientes medidas antisindicales, de carácter agresivo e ilegal de la gerencia de Grodziesk. Copias de tu mensaje serán trasmitidas automáticamente al sindicato y a la secretaría de la UITA.

●   Difundir la noticia sobre la aberrante represión sindical y la "tolerancia cero" de PepsiCo para sus empleados/as, quienes impugnan el acoso sexual en su lugar de trabajo.

●   Ponerte en contacto con el sindicato local, la central sindical nacional, su comité femenino sindical, organizaciones feministas, partidos políticos y organizaciones del movimiento laboral, exhortándolos a actuar.

●   Organizar acciones públicas para atraer a la prensa, a grupos de consumidores, accionistas de PepsiCo, grupos defensores de los derechos humanos, etc.

Agradecemos nos informes de cualquier acción que puedas realizar.
 
 

UITA

8 de marzo de 2006

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