Argentina
Ya son 280 mil los productores agrarios quebrados |
El Movimiento
Campesino de Santiago del Estero (MOCASE) denuncia que el ALCA está
destruyendo los sistemas de producción agrícola y agropecuaria del país
por medio de la multinacional Monsanto.
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En el Segundo Encuentro Regional
por la Soberanía y la Integración de los Pueblos, contra el ALCA, la Deuda
y la Guerra celebrado en Buenos Aires desde el 10 al 13 de abril, el
Movimiento Campesino de Santiago del Estero (MOCASE) denunció que el Área
de Libre Comercio de las Américas (ALCA) impulsado por Estados Unidos, ya está
destruyendo todos los sistemas de excelente calidad alimentaria de los
productos agrícolas y agropecuarios de la Argentina.
A través de la multinacional de
biotecnología agrícola Monsanto, el ALCA profundiza la dependencia
económica por medio de la introducción de semillas genéticamente
modificadas que van destruyendo la cadena natural de semillas históricas
que han evolucionado a través de los procesos naturales.
Además de la modificación brutal
de la producción agrícola, Monsanto se está apoderando progresivamente de
miles y miles de hectáreas por año. La multinacional financia a los
productores el cultivo extensivo de soja en sus tierras y firma con ellos
una prenda hipotecaria sobre sus propiedades. Cuando el productor no puede
pagar un crédito indexado al valor del dólar, la empresa traba embargo
sobre el terreno ya que la prenda no acepta pagos con maquinarias ni otras
especies.
Si bien ningún campesino
organizado ha recibido un crédito de Monsanto ni una semilla transgénica,
en el país hay 110 mil familias que están endeudadas con este monopolio
biotecnológico y 170 mil familias que están quebradas por estos créditos
impagos, corren el peligro de quedarse sin nada.
A pesar de la pesificación de las
deudas que se aplicó luego de la devaluación del peso convertible, los
créditos hipotecarios firmados con Monsanto han sido indexados en dólares
bajo expreso pedido del ex secretario del Tesoro norteamericano Paul
O'Neil al presidente Eduardo Duhalde. El acuerdo garantiza un progresivo
desapoderamiento de la tierra de los pequeños y medianos productores
agrarios en manos de una de las multinacionales más poderosas del planeta.
Monsanto es cómplice en Argentina
de "una agricultura sin agricultores" y un modelo de producción basado en
paquetes biotecnológicos que esclavizan a los productores a la semilla y a
los insumos de las corporaciones. Esto conduce al éxodo rural por llevar a
la quiebra a la mayoría de los pequeños y medianos productores que
apostaron a las semillas transgénicas y que hoy merced a la reducción de
la rentabilidad de los cultivos y a la competencia de la producción a
escala, deben abandonar sus campos.
Este plan siniestro y sistemático
se reproduce en toda América Latina y está destruyendo la autonomía de
la producción alimentaria de los países del Mercosur y del Pacto Andino.
Cumplida la etapa de devastación
del sistema productivo, las consecuencias en la cadena alimentaria humana
son dramáticas. La ingesta de alimentos transgénicos provoca la
destrucción de los sistemas inmunológicos, trastornos en el proceso
reproductivo humano y complicaciones en el sistema neurológico, con los
consiguientes peligros de muerte y precarización de las condiciones de
vida.
Esta calamidad ocurre de manera
ilegal ya que la legislación vigente establece que este tipo de ensayos
biotecnológicos deben ser aprobados por el Congreso Nacional. Esto aún no
ha ocurrido pero mientras tanto el objetivo de invasión y nueva
dependencia económica promovido por el ALCA se está cumpliendo en
silencio.
Movimiento
Campesino de Santiago del Estero (MOCASE)
"NO HAY
HOMBRES SIN TIERRA NI TIERRA SIN HOMBRES"
Agencia de
Noticias Red-Acción (ANRed)
Comunicado de Prensa,
12 de abril de 2003
5 de mayo de 2003 |