Colombia
Cuanto más se planta más derechos
se pierden
La
africanización del trabajo en las plantaciones de palma aceitera en Colombia |
Con
Hernán Correa
1
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- ¿Desde cuándo estás
involucrado en la organización de los trabajadores de la palma
africana?
- En
enero de este año la Junta Nacional de SINTRAINAGRO
decidió que estuviera al frente de la coordinación de la
subdirectiva del sector palmero. Inicié labores asesorando las negociaciones
que se desarrollaron durante febrero y marzo en dos empresas:
Oleaginosas Bucarelia y Oleaginosas Las
Brisas. La primera cuenta con 4.700 hectáreas y la otra con
unas 2.800, todas ubicadas en Puerto Wilches, Santander.
A
partir del conocimiento de la problemática del sector
palmero, vimos la necesidad de avanzar en un proceso de unidad de
los sindicatos de esa rama. Realizamos un encuentro en Bucaramanga a
fin de mayo, donde nos propusimos adelantar un trabajo de
exploración sobre las condiciones de constituir un solo sindicato en
el sector palmero teniendo presente que SINTRAINAGRO
es la mayor organización de los trabajadores agrarios del país.
- ¿Qué problemas
encontraron?
- Se
está padeciendo un proceso de debilitamiento acelerado de los
sindicatos de trabajadores del sector y un crecimiento cada vez
mayor de trabajadores empleados por medio de cooperativas y de
contratistas individuales. La estrategia de las empresas para
debilitar y eliminar los sindicatos se basa en los planes de retiro
voluntario con indemnizaciones superiores a lo otorgado por ley.
Muchos compañeros se han ido de las empresas y por lo tanto de la
organización sindical, pero vuelven a laborar en el sector con el
régimen de condiciones impuestos por las empresas a través de
cooperativas. La política de los empresarios tiende a reducir las
conquistas convencionales alcanzadas durante 20 o 30 años de lucha.
Se comenta por parte de algunos empresarios que las empresas en las
cuales los trabajadores están organizados sindicalmente son menos
competitivas, y además esos trabajadores son renuentes a aceptar las
condiciones de trabajo que esas empresas quieren imponer,
condiciones que atentan contra la salud y la dignidad de los
trabajadores. En definitiva, lo que plantean es que las
organizaciones sindicales deben desaparecer. Otra modalidad que
fomentan las empresas es que los campesinos se vuelvan parceleros de
palma ahorrándose así costos laborales. Luego, estos campesinos
deben vender la materia prima a las empresas al precio que ellas
imponen.
- ¿Los trabajadores ganan
menos en las cooperativas?
- La
gente gana menos y no tiene ninguna garantía de seguridad social.
- ¿Así que vuestro trabajo
consiste en preservar los sindicatos y sus conquistas?
-
Pretendemos preservar las conquistas adquiridas y buscar la
sindicalización de las empresas que no tienen sindicato. El índice
de trabajadores sindicalizados en el sector no supera el 10%, en un
país como Colombia donde hay aproximadamente 170 mil hectáreas
sembradas de palma africana. Pero, como decía, la tendencia es que
haya cada vez menos trabajadores sindicalizados.
- ¿Cómo son las condiciones
de trabajo en las plantaciones?
- Son
condiciones que generan un alto índice de accidentalidad laboral.
Por ejemplo: a medida que la palma es más vieja es también más alta,
y por lo tanto las condiciones de cosecha del racimo y poda de la
mata propician accidentes. Los trabajadores que se desempeñan en la
cosecha se quejan de dolores en sus cervicales y son comunes los
accidentes cuando son alcanzados por las hojas que tienen muchas
espinas. Por otro lado, en las plantaciones también se fumiga para
el control de plagas y no se sabe qué impactos en el ambiente y en
la salud ocasionan esos productos.
- A pesar de los problemas
mencionados, ¿se logró la firma de algunos convenios colectivos?
- Se
logró en Bucarelia y en Las Brisas.
Además, trabajadores de algunas cooperativas están exigiendo mejores
condiciones laborales.
Autor:
Gerardo
Iglesias
© Rel-UITA
26-11-02
NOTA
1-
Secretario
General de SINTRAINAGRO y Secretario de Asuntos Agrarios de la CUT. |