Régimen de prejubilaciones y despidos incentivados
Sindicato cervecero avala la “solución” |
De los noventa
trabajadores, 78 acordaron un régimen de prejubilaciones
hasta 2008 para quienes tienen 55 años de edad, percibirán
el primer año 70 por ciento del salario y luego 80, y
quedarán a disponibilidad de la empresa. La firma a su vez
efectuará los aportes correspondientes hasta la jubilación y
además quedarán tres sueldos para cobrar el trabajador.
Doce empleados
optaron por un despido incentivado llegando a un acuerdo con
AmBev, y en esto no participa él (SOEN) las negociaciones
quedaron libradas a la participación de cada trabajador con
su empleador.
Los dirigentes
sindicales dialogaron con LA REPUBLICA, que de primera mano
conoció los detalles de lo acordado con la multinacional
AmBev-Quinsa.
La asamblea general
de los trabajadores ante la última propuesta realizada por
los voceros de la empresa aceptaron la misma poniendo fin a
un largo conflicto originado en el año 2001, cuando asume la
nueva directiva del gremio y se conocen los rumores por
parte del gerenciamiento general en San Pablo había decidido
el cierre de planta en Paysandú.
A partir de ese
momento se inicia una ronda de contactos al más alto nivel
llevado adelante por los trabajadores, preocupados por la
incertidumbre que representaba para noventa familias quedar
sin sus puestos de trabajo en el momento más crítico.
Diversos
Planteamientos fueron canalizados por cuatro ministerios que
inmediatamente se pusieron a trabajar en el tema, se logró
llevar el planteo por parte de la Unión Internacional de los
Trabajadores de la Alimentación (UITA) a Brasil, el Poder
Ejecutivo, el Parlamento, y legisladores de todos los
sectores políticos, sin encontrar en esa oportunidad muchas
señales de que los mismos tuviesen receptividad. Los
directivos de AmBev seguían sosteniendo que el cierre de la
Planta Norteña era “irreversible”.
Surge el interés del
Centro Cooperativista Uruguayo (CCU) y de la Confederación
de Entidades Cooperativas (Cudecoop) de trabajar en un
proyecto de elaboración de cerveza ecológica. El ministro de
Industria, Energía y Minería, doctor Pedro Bordaberry, está
trabajando actualmente junto a técnicos de la Dirección
Nacional de Industrias y asesores, y el mismo puede resultar
viable.
El propio intendente
municipal Alvaro Lamas toma el problema de los trabajadores
como suyo, e inicia también diversos contactos tendientes a
encontrar una rápida respuesta de los poderes, manifiesta
que “ los funcionarios de la planta que han trabajado
durante años en ella, se ven afectados, porque atendiendo
solamente mezquinos intereses económicos y perdiendo de
vista todo lo que significa el interés social, la empresa se
da el lujo de cerrarnos una planta emblemática” señalo en su
momento el jerarca.
Muchas idas y
venidas y el tiempo trascurre, hasta que finalmente se llega
a una solución, la cual para el gremio, lo admite, es una
“derrota” el cierre del sector cervecero.
Los sindicalistas
reafirmaron que “se cumplió con no aceptar los despidos
compulsivos. Se buscaron todas las alternativas posibles
para que la planta continuase elaborando cerveza y no
cierre, el trabajo de una Ley antimonopólica que puede
servir para que no ocurra este tipo de atropellos a nuestra
industria”, indicaron.
Asimismo
manifestaron, que “faltó voluntad política de algunos
protagonistas que tuvieron que asumir otro compromiso, el
propio señor Presidente de la República, que pudo recibir al
director técnico de la selección nacional, Juan Ramón
Carrasco, a quien respetamos desde el punto de vista
deportivo, pero no tuvo tiempo de recibir a los trabajadores
de Norteña, creemos que tiene una pequeña confusión con las
prioridades que tiene un país, es importante el deporte,
pero mucho más, la gente y el trabajo”, subrayaron.
Diario:
La República
6 de
mayo de 2003 |