Cesó el viernes producción de cerveza en planta local |
El viernes dejó de
producirse cerveza en la planta de Cervecería y Maltería
Paysandú (CYMPAY) y tampoco se cuenta con insumos para
reanudar la producción, por lo que esta decisión agrega una
cuota de incertidumbre a la ya difícil situación que viven
los trabajadores, destacaron a EL TELEGRAFO dirigentes del
Sindicato de Obreros y Empleados de Norteña (SOEN).
La decisión
determina que todo el personal afectado a la embotelladora y
otras dependencias haya pasado al Seguro por Desempleo
(cobrando un total del 90 por ciento del salario) o estén
usufructuando la licencia, señaló José Onetto, integrante de
la Comisión Directiva de la gremial.
Onetto subrayó que
“la producción terminó el viernes, cuando se dejó de
embotellar. Tampoco hay cerveza hecha y no hay insumos para
reanudar la elaboración del producto”.
“Este viernes se
terminó la última producción, y no contamos con ningún
insumo que nos dé esperanzas de que se vaya a reanudar la
tarea”, precisó el dirigente sanducero, al indicar que se
mantiene en tareas el personal de mantenimiento y de
maltería, entre otras dependencias de la planta sanducera.
Acotó que los
trabajadores mantienen la expectativa que pueda llegar a
concretarse alguno de los proyectos que lleva adelante el
ministro de Industria, Energía y Minería, doctor Pedro
Bordaberry, como alternativa al anunciado cierre de la
cervecería por parte de la multinacional Quinsa-AmBev, “pero
estamos esperando que se presente alguna carpeta, para
analizarlo nosotros y la empresa”. Acotó que “debemos tener
en cuenta que en una semana termina el plazo establecido
para la negociación, y todavía no tenemos nada más o menos
concreto para analizar, y tampoco la empresa, que no se ha
mostrado muy interesada en alternativas de producción”.
A la vez “por
nuestra cuenta tenemos encaminados contactos con productores
para avanzar en las perspectivas de producción ecológica,
para lo que se requiere que toda la cadena sea ecológica, es
decir partiendo de agua de manantial, y siguiendo con la
producción de cebada, además de todo el proceso de
elaboración y la propia tecnología y maquinaria”.
Ante el cese de la
producción, y acercarse el fin del plazo, el SOEN decidió
trasladarse temporalmente a la carpa de vigilia montada
frente a la planta, “donde estaremos en sesión permanente
considerando la situación”, a la vez de incorporarse a la
guardia de 24 horas, ante la posibilidad que se decida el
desmantelamiento y traslado de maquinaria.
Diario:
El
Telégrafo
1º de abril de 2003 |