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Asamblea de Norteña aceptó fórmula y conflicto se encamina a solución

  

Los trabajadores de Norteña resolvieron en multitudinaria asamblea aceptar la última propuesta de la empresa AmBev-Quinsa, para poner fin a un conflicto que no ha podido revertir la decisión de cierre de la planta cervecera en Paysandú y tampoco implica noventa soluciones “para otros tantos problemas causados por la empresa”, de acuerdo a lo expresado por dirigentes del Sindicato de Obreros y Empleados de Norteña (SOEN).

Durante cinco horas y media, y desde poco después de las 9, la asamblea efectuada en la sede sindical analizó la situación a partir de la última fórmula surgida de la negociación con representantes de la multinacional en Montevideo, en cuyo desarrollo hubo posiciones diferentes por parte de los empleados de la ya ex planta cervecera, por cuanto los alcances de la solución no contemplaba todas las posiciones.

José Onetto, dirigente del SOEN, señaló a EL TELEGRAFO que pese a que se ha aceptado en principio la propuesta, se aguardará que en el curso de esta semana se modifiquen algunos términos de la redacción, para contemplar aspiraciones que no son incluidas en la fórmula.

En esta se establecen soluciones para un grupo de funcionarios prejubilables hasta el año 2008, así como un porcentaje de trabajadores que va a tener reducción horaria, de 48 a 36 horas semanales, y otro grupo que trabajará en la prestación de servicios tercerizados, a través de la modalidad cooperativa.

Estos servicios ya están tercerizados a otras empresas y ahora son cedidos al sindicato, y con esta fórmula se cubre la gran mayoría de las posibilidades, en tanto por otro lado hay trabajadores que de acuerdo a sus situaciones particulares, aceptarían un despido mejorado de la empresa, en negociación que no está incluida en la fórmula y que se hará “por fuera del sindicato”.

“No tenemos completas las noventa soluciones, y por eso estamos condicionando la respuesta positiva a que en el transcurso de la semana se mejore la redacción de la propuesta”, señaló Onetto.

Por lo tanto, en las próximas horas se establecerán nuevos contactos con representantes de la empresa para mejorar algunos términos en la fórmula, “que significa trabajo por espacio de un año para todos. Después volveremos a dialogar con la empresa”, explicó el dirigente.

“Tendremos un año de convenio para las empresas de terceros, como así también para la reducción horaria, en tanto en el caso de los prejubilables el acuerdo rige hasta el año 2008”, añadió.

Las alternativas laborales incluyen tareas en el sector maltería, servicios en calderas, limpieza de oficinas, suministro de leña para las calderas, mantenimiento de espacios verdes y carga de cebada para exportación en vagones, entre otros.

Por otro lado, “la tercerización en empresas cooperativas nos permitiría estabilizar el salario en un nivel digno”, concluyó.

 

Diario:

El Telégrafo

28 de abril de 2003

 

 


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