La denominada Coordinación
Latinoamericana pro Defensa de la
Agroindustria Azucarera, que tendrá su
sede en México, se encargará de
vigilar que no se realicen acciones
que conlleven al debilitamiento del
sector, entre otras medidas, informó
un portavoz.
'También, buscará nuevas vías para la
comercialización del edulcorante, como
sería la producción de metanol, que
ayudaría a disminuir los índices de
contaminación en México', agregó.
La constitución del organismo fue
firmada por Luisa Melle, de Argentina;
Arthur Bueno, de Brasil; Luis Pedraza
y Guillermo Rivera, de Colombia;
Leonardo de León, de Uruguay, y el
mexicano Enrique Ramos, secretario
general del Sindicato Nacional de
Trabajadores de la Industria Azucarera
en este país.
Los sindicatos mexicanos propusieron
el pasado abril, durante una reunión
de la Unión Internacional de
Trabajadores de la Alimentación
(UITA), celebrada en Ginebra (Suiza),
la formación del organismo.
El mecanismo de coordinación será
presidido por el mexicano Enrique
Ramos.
El secretario regional de la UITA,
Gerardo Iglesias, dijo que 'el
objetivo es conformar un frente
azucarero internacional contra las
prácticas que pretende debilitarlo'.
Recientemente, el Congreso de México
aprobó una nueva ley para impulsar y
proteger la industria azucarera
nacional en beneficio de 2,5 millones
de mexicanos que viven de ese sector.
La nueva Ley de Desarrollo Sustentable
de la Caña de Azúcar obliga al Estado
a impulsar políticas y programas para
fortalecer la producción y la
comercialización, así como otorgar
estímulos, promover los avances
tecnológicos e impulsar la
diversificación del uso de la caña de
azúcar.
Esta ley no ha sido aún promulgada por
el presidente de México, Vicente Fox.
Los problemas del sector se han
agravado por el fallo de la
Organización Mundial de Comercio (OMC)
en contra de México, por aplicar un
arancel de 20 por ciento a los
refrescos elaborados con fructosa para
fomentar el uso de la caña de azúcar,
lo que originó una disputa comercial
con EEUU.
El Tratado de Libre Comercio de
América del Norte (TLCAN) estipula la
apertura comercial para los excedentes
de azúcar mexicano al mercado
estadounidense, sin embargo,
Washington ha fijado cupos a las
exportaciones de México.
Terra - EFE
8 de julio de 2005 |