La
producción y el precio del banano siguen dando que hablar. En Ecuador,
los productores manifestaron estar dispuestos a ir a la huelga si los
exportadores no les pagan el precio oficial de US$ 2,90 por caja de 22 libras.
Teniendo en cuenta que el precio de la caja de banano en Estados Unidos
ronda los US$ 14, mientras en Europa oscila entre US$ 16 y US$
18, los productores no justifican que los exportadores se nieguen a pagar el
precio oficial. Los más enojados son los aproximadamente 2.180 pequeños
productores de la zona conocida como El Oro.
Por
su parte, en la zona sur de Costa Rica se produjo el cierre de
varias fincas bananeras. En total son 2.450 hectáreas de plantación destruidas
y unos 2.000 empleos directos perdidos. Cinco fincas dejaron de ser atendidas en
noviembre del año pasado y otras seis, pertenecientes a cooperativas,
trabajaron hasta el pasado julio. El ministerio de Agricultura decidió
erradicar las plantaciones dado que se habían convertido en un foco de
sigatoca. Los productores alegan que los bajos ingresos les generaron problemas
para pagar las deudas contraídas con los bancos, al tiempo que les resultó
imposible rehabilitar las plantaciones debido a su alto costo.
La
errática política de los distintos gobiernos que se sucedieron en Costa
Rica desde 1988 (fecha en la que se inició la plantación de banano en
la zona) es la responsable de la actual situación. Ahora se buscan soluciones,
pero el remedio puede resultar peor que la enfermedad. El gobierno apuesta a
conseguir donaciones provenientes de Taiwán para desarrollar
cultivos de plátanos, palma aceitera y bambú comestible.
A
todo esto, los próximos días 6 y 7 de diciembre se reunirán los presidentes
de Costa Rica, Miguel Angel Rodríguez, y Ecuador,
Gustavo Novoa, para analizar el comercio del banano y la
integración regional. El presidente de Costa Rica manifestó
que es necesario que Ecuador, primer productor mundial de la
fruta, y Costa Rica, segundo, sumen esfuerzos para obtener
mayores beneficios con el comercio mundial del banano. En una conferencia de
prensa celebrada el 13 de noviembre, Rodríguez manifestó: "Queremos
trabajar en una política común del banano y no caer en manos de las
comercializadoras multinacionales". El pronóstico es: difícil para
Sagitario.
El
banano es un punto de discordia entre Ecuador y Costa
Rica. Meses atrás, Luis Umaña, presidente de la Cámara
de Productores Independientes de Costa Rica, denunciaba que mientras en
este país se pagan entre US$ 14 y US$ 18 diarios a los trabajadores bananeros,
en Ecuador sólo se les paga US$ 3, lo cual genera una
competencia desleal. Por su parte, el Consejo Nacional del Banano
(CNB) de Ecuador replicó que la diferencia de
costos entre ambos países pasa por otro aspecto: mientras en Ecuador
se utiliza un promedio de 3,8 kilos de agrotóxicos por trabajador, en Costa
Rica se llega a 38 kilos. Hambre y miseria en un caso, utilización
masiva de venenos en el otro, son las "ventajas comparativas" que
defienden ambos gobiernos. Aguardaremos la reunión de ambos mandatarios para
conocer las bases de la "política común" que establecerán para el
banano. Aunque mucho tememos que ni los salarios, ni los agrotóxicos,
figurarán en su agenda.
Ecuador
es el primer exportador de banano con 105 millones de cajas (de 18,14 kilos cada
una) en el primer trimestre del año en curso, volumen que significa el 36% de
la cuota mundial. Por su parte, Costa Rica exportó en el mismo
período 48 millones de cajas, 16% del mercado.
Chiquita
acuerda con los acreedores
El
gigante bananero estadounidense Chiquita Brands International
alcanzó el 12 de noviembre un acuerdo con sus acreedores, mediante el cual
entregará a los tenedores de su deuda sénior casi 88% de las acciones
de la empresa. De esta forma, Chiquita introducirá un plan de
reorganización conforme a lo que establece el código de bancarrota de Estados
Unidos, mediante el cual se protege para reordenar sus finanzas.
Chiquita,
la mayor empresa bananera del mundo con sede en Cincinnati,
tiene cultivos en Panamá y Costa Rica y
además tiene presencia en Chile y Colombia.
En Chile, durante la temporada 2000-2001 la compañía realizó
ventas por US$ 45 millones en fruta fresca, de los cuales US$ 43 millones
corresponden a exportaciones y US$ 1,8 millones en el mercado interno, mientras
que las ventas de fruta seca llegaron a US$ 2,6 millones. Para la temporada
2001-2002, la compañía espera que las ventas de su subsidiaria chilena (Chiquita
Enza Chile) lleguen a US$ 68 millones.
Con
131 años de existencia, Chiquita experimentó pérdidas por
más de US$ 1.500 millones en un período de ocho años debido a una disputa con
la Unión Europea sobre la importación de banano. Acaba de
trascender que el consorcio Consolidate Fruit Company, que
posee cerca del 10% de las acciones de Chiquita, inició
negociaciones para adquirir la totalidad de la compañía bananera, posiblemente
mediante el establecimiento de joint ventures con algunas otras empresas. Consolidate
es un holding integrado por Banistmo Capitals Market Group y
otras dos empresas panameñas registradas en las Islas Vírgenes.
Autor:
Enildo
Iglesias
©
Rel-UITA
11 de diciembre de 2001