El pasado
26 de octubre culminó en Buenos Aires la 2da. Conferencia de Trabajadores del
Mercosur Sector Carne, en el cual se están produciendo grandes cambios, se
aguardan otros y el panorama se complica en múltiples sentidos. Una intervención
más eficiente de los sindicatos y de los pequeños productores, más la urgente
implementación de políticas públicas en defensa del trabajo y la soberanía
alimentaria, fueron acciones definidas como imprescindibles por todos los
delegados y delegadas de la subregión.
La presencia
creciente de compañías transnacionales en el sector carnes; la concentración
frigorífica en Argentina y Uruguay instrumentalizada por empresas
brasileras; la monopolización del sector en un puñado de empresas en Brasil;
la inyección de fondos públicos en la capitalización de las transnacionales
made in Brasil; la situación creada por la falta de stock ganadero en
Argentina y Uruguay; el desplazamiento de la frontera sojera en
detrimento de las áreas de crianza sobre pasturas naturales; el avance del “colesterol
del feedlot” (las vacas engordadas en corral igual que los
pollos) y la pérdida de calidad de nuestros productos; los consumidores y
trabajadores pagando los platos rotos del fiestín de unos pocos; el
impacto ambiental y los problemas crecientes en materia de salud y condiciones
de trabajo, justificaban la realización de esta 2da. Conferencia de
Trabajadores del Mercosur Sector Carne.
Con la incorporación a la UITA de la
Federación Gremial del Personal de la Industria de la Carne de
Argentina,
nuestra Internacional representa la mayor parte de las
organizaciones sindicales del sector tanto en ese país como en
Brasil.
A esto debemos sumarle el crecimiento en afiliaciones que la UITA está
logrando en
Uruguay.
Este
contexto nos motivó para hacer el llamado a constituir una
Coordinadora de Trabajadores de
la CARNE del MERCOSUR,
y desde ese ámbito potenciar el trabajo de nuestra Internacional procurando
mejorar los canales de información, desarrollar las acciones de solidaridad
articulando fuerzas para dar visibilidad a toda la situación y enfrentar los
desafíos que presenta este sector ante sus trabajadoras y trabajadores.
Fueron dos
días de trabajo pleno, jornadas en las cuales captamos mayores y nuevos insumos
para realizar una puesta a punto sobre las transnacionales del sector:
quién es quién y cómo
juega en el escenario regional y global.
Un
encuentro para conocer fortalezas y debilidades de nuestras organizaciones, y
sobre todo para diseñar las estrategias que nos permitan
avanzar en la dignificación del
TRABAJADOR y la TRABAJADORA de la CARNE.
|