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Los trabajadores de la
pesca agrupados en el Sindicato Único de Pescadores de Nuevas Embarcaciones del
Perú (SUPNEP), mantuvieron recientemente una entrevista a nivel ministerial en
la que plantearon sus principales preocupaciones. En diálogo con Sirel, Juan
Pedemonte Hernández, secretario general del SUPNEP, detalló ese encuentro.
-¿Cómo transcurrió vuestra
reciente entrevista con el Ministro de la Producción?
-Fuimos recibidos en la pasada semana por el Ingeniero
Rafael Rey, que ocupa esa Secretaría, a quien le planteamos que el problema
de nuestra jubilación continúa inalterado, ya que estamos pidiendo que se nos
integre al sistema público nacional. Estamos muy preocupados porque en
aplicación de supuestas medidas de amparo, los jueces están ordenando que los
aportes que deben hacer los empresarios a la Caja del Pescador, que está
quebrada, sean depositados en sus despachos para distribuirla entre los
jubilados. Pero este régimen no tiene legalidad alguna y no puede extenderse en
el tiempo. Además, si esos fondos ya no van a la Caja, ¿con qué se les va a
pagar la jubilación a los trabajadores que ahora están activos y aportando?
Queremos que el gobierno nos traslade de una vez a la Oficina Nacional de
Previsión para que todo se pueda regularizar.
-¿Qué respondió el Ministro?
-Que el Estado está tratando de encontrarle una solución a
este problema que les preocupa mucho. Le ha solicitado el Ministerio de Economía
que elabore una estadística para saber cuánto le costaría al Estado regularizar
la situación. Así pues, mantenemos la esperanza de que el gobierno asuma esta
responsabilidad.
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No podemos seguir viendo cómo
otros se llevan la enorme riqueza que tenemos frente a nuestras
costas, mientras nuestro pueblo padece hambre. |
-¿Qué otros temas le plantearon
al Ministro?
-Hablamos sobre el sobredimensionamiento de la flota pesquera
que, entre otras consecuencias, ha provocado que en 2005 los trabajadores
hayamos tenido apenas 102 días de labor, en 2006 sólo 48 días y para 2007 ya
vemos que tampoco pasaremos de esa cantidad. Estamos reclamando que se ordene la
flota, que se achique, para que los trabajadores tengan un ingreso digno, Al
mismo tiempo, solicitamos que se recicle a los trabajadores que podrían quedar
excedentarios, que se les brinde capacitación e indemnizaciones para que puedan
cambiar de rubro. La escasa cantidad de días trabajados tiene otra consecuencia
negativa, y es que la ley jubilatoria exige que el trabajador haya aportado
durante 15 semanas en los últimos 12 meses para que ese año sea considerado
contributivo, de lo contrario no entra en la estadística. Y actualmente los
pescadores no estamos alcanzando ese mínimo, por lo que hace tres años que se
nos descuenta pero no acumulamos derechos.
-¿Pudieron ampliar otros
asuntos?
-Hemos dialogado acerca de que existen en nuestras costas
embarcaciones grandes, de mil y dos mil toneladas, de bandera holandesa que
pescan el furel y la caballa para llevarlo a Europa. Le planteamos al
Ministro la conveniencia de iniciar una campaña de promoción del consumo interno
de esas especies, siendo que los precios del pollo y de la carne han aumentado
tanto. Pero para eso los empresarios deben recibir algún estímulo, tal vez una
rebaja del combustible como la tienen las flotas de Ecuador y otros
países, y de esa manera traer ese pescado a precios populares. En Perú
estamos comiendo furel que viene importado desde Chile, siendo que
tenemos una flota ociosa buena parte del año, y niños y ancianos desnutridos.
También le planteamos la necesidad de que se exonere de impuestos a los
emprendimientos para construir más plantas frigoríficas en nuestra costa, como
forma de estimular la actividad, de poder almacenar el producto y distribuirlo
así a todo el pueblo peruano en condiciones de salubridad adecuadas. No podemos
seguir viendo cómo otros se llevan la enorme riqueza que tenemos frente a
nuestras costas, mientras nuestro pueblo padece hambre. Creemos que el Ministro
Rey ha entendido cabalmente nuestros planteos.
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