El
Sindicato Único Gastronómico del Uruguay (SUGU) celebró sus
105 años de vida junto a los trabajadores del sector,
dirigentes sindicales, representantes empresariales,
diputados nacionales y al director Nacional de Trabajo,
Julio Baraibar. El Servicio Informativo de la Regional
Latinoamericana de la UITA (Sirel) dialogó con el secretario general del SUGU y le llevó
el saludo de su par en Argentina, la UTHGRA.
-¿Qué
significación tienen estos 105 años del SUGU?
-Es un gran orgullo cumplir tantos años de existencia, pero a
la vez es mucha responsabi-lidad. Somos una generación
continuadora de tantas otras de uno de los sindicatos más
antiguos. El 17 de agosto de 1900 nació una agremiación muy
característica de aquellos años como fueron las sociedades
cosmopolitas de socorro mutuo. En el transcurso de un siglo
adquirió diferentes características, pero la madre de todo
fue la Unión Cosmopolita de Mozos, que hoy forma parte de
nuestro nombre UCOM-SUGU. Un día como el de hoy dedicamos
nuestro recuerdo a tantos compañeros, tantos momentos, tanta
lucha; en definitiva, el alto en el camino hoy, es fabuloso.
-¿Cómo
encuentra al SUGU este momento en la vida del país, con un
gobierno progresista, con los consejos de salarios
instalados?
-Hoy cerramos una etapa, un plan de trabajo de los últimos
cuatro meses. Nos encontramos en un marco político
diferente, histórico, después de diez años de que se
hubiesen suspendido las negociaciones de los consejos de
salarios, y reconstruyendo desde los escombros, porque
estaba todo muy deprimido. Pese a la fragmentación que
tienen nuestras actividades acabamos de firmar siete
convenios, y estamos muy conformes con ello.
-En este
marco político diferente todos los días se conforman nuevos
sindicatos, ¿cuántos se han afiliado en los últimos meses a
nivel de Confederación de Federaciones y Sindicatos de la
Alimentación (COFESA)?
-De siete u ocho pasamos a 23 sindicatos registrados en la
Confederación. El sector de la alimentación tiene cerca de
60 mil trabajadores de los cuales, entre todos los
sindicatos, podemos decir que 18 mil están afiliados, y va
en franco crecimiento.
-¿Cuál
es la perspectiva que ven en las instancias de negociación
tripartita?
-Hemos cerrado las negociaciones salariales y ahora entramos
en la aplicación de los laudos, una etapa muy diferente e
importante en la que hay que estar muy atentos. En mi caso,
trabajo motivando compañeros en pos de una negociación
salarial, pero en realidad es más contundente organizar
trabajadores a partir del reclamo de lo que le corresponde,
de una categoría, de una función de tareas definidas o de un
mínimo salarial que se tiene que aplicar, y eso sí que
organiza. Hoy, 17 de agosto, estamos conmemorando el día del
trabajador gastronómico a nivel nacional, y esta vez la
fecha ha llegado a más trabajadores que nunca, es un feriado
no laborable en todo el país que inclusive alcanza a los
trabajadores que venden productos chacinados en la vía
pública. Estoy seguro de que muchísimos trabajadores no
están enterados de este día y están trabajando, pero mañana
van a saber que este día lo tienen generado y que se lo
tienen que pagar como si lo hubieran trabajado. Quiero decir
que va a aparecer la reivindicación de lo laudado y lo
pactado.
-Y en
cuanto a la obra social, ¿qué encuentra el afiliado en el
SUGU?
-Estamos en una pobreza franciscana. Lo que intentamos es que
los compañeros se afilien, la cuota es muy baja y no tenemos
descuento por planilla en la nómina. Es una enorme
aspiración poder brindar una obra social amplia, pero se
hace muy difícil si no se tienen recursos económicos. No
obstante estamos planteando y lanzando públicamente dos o
tres proyectos. Queremos que aquí funcione una escuela de
gastronomía para los afiliados; estamos presentando un
borrador de anteproyecto de servicio de empleo eventual del
sector gastronómico que moderniza la Bolsa de Trabajo, que
por más de 80 años fue un organismo gremial de este
sindicato. Se trata de un paso enorme que damos y debemos ir
desde el acuerdo tripartito y originar ese servicio para que
tenga cobertura social; también estamos anunciando una
cooperativa de trabajo con jóvenes con capacidades
diferentes que se han formado con nosotros y que queremos
apoyar institucionalmente para que generen sus espacios de
trabajo. Además, aquí en nuestra sede, en las plantas
superiores y a través de un convenio con la Intendencia
Municipal de Montevideo, funciona por cuarto año consecutivo
el Plan Invierno que le brinda alojamiento todas las noches
de invierno a 36 personas. Son granitos de arena que se
aportan, y tenemos que crecer en ese aspecto porque si no la
función del sindicato queda encerrada entre las cuatro
paredes de una negociación.
Rubén
Yizmeyián
© Rel-UITA
18 de
agosto de 2005
*
Secretario general del SUGU desde 1989.