Reclaman
política de estado para pequeños y medianos productores
FNC inició
movilización indefinida
en contra del gobierno
|
La Federación
Nacional Campesina (FNC) anunció el inicio de una movilización por
tiempo indefinido, desde el 8 de febrero, con el cierre de rutas en
nueve departamentos del país, para exigir una política de Estado que
favorezca a los pequeños y medianos productores, en particular a los
algodoneros. Esta organización campesina sostiene que la indemnización
planteada por el Gobierno no puede reducirse a un acto asistencialista y
prebendario, sino que debe estar enmarcado dentro de una política de
desarrollo a mediano y largo plazo.
La FNC reclama un precio
base de 2.200 guaraníes (0,36 centavos de dólar) por kilo de algodón y la
provisión de bolsas cosecheras, el transporte de la producción a las
desmotadoras y la compensación por las pérdidas sufridas a consecuencia de
la sequía, la falta de tubos matapicudos y el ataque de plagas.
El gremio denunció la ineficacia de los insecticidas distribuidos por el
Gobierno, que no controlaron el ataque de las plagas, especialmente el yso
karu (una oruga cuyo nombre científico es Alabama argillacea).
Las movilizaciones se realizarán en los departamentos de San
Pedro (Santaní y Tacuara), Caaguazú (Plaza Libertad y Ruta 7 Internacional),
Concepción (Cruce Horqueta), Caazapá (Plaza Pa`i Fariña de San Juan
Nepomuceno), Canindeyú (Jasy Kañy y Curuguaty), Central (Itá), Paraguari (Acahay),
Guairá (Villarrica) y Misiones (San Patricio). Los productores movilizados
realizarán a la vez una campaña de explicación a la sociedad sobre los
motivos de las medidas de presión.
Al mismo tiempo, la FNC rechaza totalmente que los militares
controlen el peso y la tipificación del algodón entregado en las
desmotadoras. Marcial Gómez, secretario general adjunto del gremio, sostuvo
que dicho control no es función de los militares, quienes no están formados
para ello y carecen de la capacidad necesaria para desempeñar dicha labor
técnica.
“Su verdadera función en las desmotadoras sería más bien
amedrentar a la población” afirmó. Indicó que, con la presencia militar en
la cadena productiva, el Gobierno va incrementando las señales de
autoritarismo y retroceso en relación a las libertades públicas.
“La verdadera función de las fuerzas militares es garantizar
la soberanía del país, función que ellos incumplen, ya que, por ejemplo,
toda la frontera paraguaya está poblada por extranjeros que imponen su ley
propia” expresó. Recordó que el 70% de los latifundios en Paraguay está en
manos de extranjeros.
Objetivos claros
Históricamente, las
movilizaciones de la FNC se han realizado en defensa de los intereses
nacionales y por el desarrollo del país, afirmó Marcial Gómez. Recordó que,
a lo largo de todo su testimonio de lucha, el gremio ha demostrado que sus
movilizaciones han tenido objetivos claros de defender los intereses
campesinos y que nunca se ha prestado a manipulaciones políticas por parte
de sectores interesados, que siempre intentan utilizar a grupos del
campesinado.
Gómez también mencionó que la organización campesina seguirá
defendiendo las libertades públicas ante cualquier resurgimiento del
fascismo, en cualquiera de sus formas y proveniente de cualquier sector.
Resaltó que actualmente, las dos fuerzas en pugna en las internas del
Partido Colorado (nicanorismo y neostronismo) tienen tinte autoritario.
La FNC ve señales de resurgimiento del fascismo en la
militarización del campo (lo más reciente es el planteamiento de que los
militares controlen el peso y tipificación del algodón entregado en las
desmotadoras), la conformación de las denominadas “guardias ciudadanas”, y
las agresiones al profesor Luis Alfonso Resck (histórico luchador en contra
de la dictadura stronissta) o la periodista de Canal 9, Daniela Candia.
El gremio considera que el cambio se conquista a través de la
participación política organizada del pueblo, donde todos plantean,
discuten, deciden y son responsables de la ejecución de lo decidido. Gómez
afirmó que fortalecer las organizaciones y la participación directa del
pueblo es el camino para resistir ante estos avances autoritarios en las
libertades públicas.
Recordó hechos resaltantes
en la historia de la FNC en este sentido, como las luchas en el marzo
paraguayo, por la conquista de tierra, la defensa de los bienes públicos, la
resistencia contra el modelo agroexportador y por la reforma agraria y el
desarrollo industrial.
En contra de las “guardias ciudadanas”
La FNC también expresó su
rechazo a la práctica represiva y anticonstitucional de civiles armados
organizados en las denominadas “guardias ciudadanas”, que están creando
zozobra y amedrentando a la población en diversas zonas del país. El gremio
exigirá al Ministerio del Interior una explicación pública sobre esta
situación y responsabiliza al Gobierno Nacional sobre cualquier consecuencia
que pueda derivar de esta situación.
Así expresa el documento
firmado por Odilón Espínola y Marcial Gómez, secretario general y general
adjunto respectivamente del gremio de productores, que ya fue presentado al
Ministerio del Interior.
Para la
FNC, estas “guardias” son los “típicos grupos garroteros, que actúan
impunemente en complicidad con las autoridades locales y bajo la anuencia de
las instituciones correspondientes en varias zonas del país”. Esta práctica
busca someter nuevamente a la población bajo una vieja práctica de la
dictadura, “y está orientada hacia la restauración del fascismo en el país”
expresaron los líderes labriegos.
La FNC
reitera su histórica posición en defensa de las libertades públicas, ante
cualquier resurgimiento del fascismo en cualesquiera de sus formas y
proveniente de cualquier sector. El documento presentado ante la cartera de
Estado señala que un ejemplo de la práctica impune de estas “guardias
ciudadanas” -a las que los productores denominan “comisión garrote”- es la
situación vivida en el distrito de San Juan Nepomuceno del Departamento de
Caazapá.
El
material señala que en dicha zona los civiles armados siguen realizando
“procedimientos” tales como “allanamiento de vivienda, detención de
personas, torturas a quienes no obedecen sus órdenes, amenazando con crear
hasta su propio calabozo”. Cita como ejemplo el caso de Juan Carlos Silvero
Medina, brutalmente garroteado en su casa.
La FNC
resalta que los problemas sociales (como el hambre, la miseria, la
desocupación y la delincuencia) no se solucionarán con medidas represivas,
autoritarias y fascistas, creando zozobra y amedrentando a la población.
Afirma que la verdadera solución a los problemas sociales y económicos del
país vendrá solamente con la implementación de una política de reforma
agraria y desarrollo industrial, centro de lucha del gremio.
Finalmente, los dirigentes gremiales sostienen en su documento que los ejes
de lucha de la FNC son la reforma agraria, el desarrollo nacional, la
defensa de las libertades públicas y una verdadera democracia con justicia
social. Y que la misma debe sustentarse en la participación política
organizada del pueblo.
Desde Asunción, Rosalía
Ciciolli
© Rel-UITA
8 de febrero de 2006