Montevideo, 7 de mayo de 2007
Señor Miguel Ángel Peñalva Aridita
Gerente
General del Grupo CALVO
El Salvador
Fax. 503 22
44 48 50
De mi mayor
consideración:
Estamos
informados por nuestra afiliada, el Sindicato General de
Trabajadores de la Industria Pesquera y Actividades Conexas
(SGTIPAC), y por su seccional CALVO Conservas,
de que mañana, 8 de mayo de 2007, tendrá lugar la primera
audiencia de conciliación entre usted, en representación de
la empresa CALVO, y la señora Berta Menjivar,
fundadora de la referida seccional sindical que fuera
despedida en represalia de su compromiso con la organización
de los trabajadores y trabajadoras.
En mi
calidad de Secretario Regional para América Latina de la
Unión Internacional de Trabajadores de la Alimentación y la
Agricultura (Rel-UITA), quiero expresarle nuestro más
decidido y completo apoyo a la señora Berta Menjivar,
en la convicción de que ella es una trabajadora ejemplar, y
que su despido proviene de prácticas antisindicales que han
sido moneda corriente en El Salvador, pero que gracias a la
lucha de los trabajadores y las trabajadoras vienen cediendo
terreno en aras de un relacionamiento laboral democrático e
incluyente.
Nos llama
poderosamente la atención que la empresa CALVO
utilice dos escalas de valores contradictorias para
establecer su relación con los sindicatos: una para España,
donde son respetados los derechos básicos de los
trabajadores, y otra para El Salvador donde, por intermedio
de agentes locales, entrenados en
una cultura exacerbadamente
antisindical,
se
ejerce una política de persecución contra los trabajadores
organizados o con la intención de organizarse.
En este
caso, junto con Berta Menjivar, reclamamos
su reintegro
incondicional al puesto de trabajo que ocupaba antes de ser
despedida; el pago íntegro de los salarios caídos desde el 9
de febrero de 2007 –fecha de su despido injustificado- hasta
el día de su reintegro; el compromiso formal de la empresa y
la garantía de que no habrá nuevas discriminaciones en su
contra.
Asimismo,
lamentamos profundamente que el pasado miércoles 2 de mayo,
el gerente de producción, señor Parada, haya rechazado
entrevistarse con nuestro enviado, Carlos Amorín, quien se
encontraba en La Unión, ante la misma puerta de la planta
junto a directivos sindicales locales. Rechazamos de manera
categórica la actitud del gerente Parada de solicitar a la
Policía el desalojo de la delegación, a la que acusó de
manera infundada, de realizar “una manifestación” a la
entrada de la fábrica, según el propio testimonio de los
agentes policiales desplazados hasta el lugar.
Este grave
incidente que pudo tener consecuencias peligrosas para
quienes se encontraban allí en una actitud totalmente
pacífica, y que de la manera más respetuosa demandaban algo
previamente acordado con usted –la posibilidad de mantener
un diálogo en cualquier ocasión que se demandara-, no hace
sino confirmar que quien define la estrategia a seguir en la
relación con el sindicato en CALVO El Salvador, está
utilizando criterios con base en una experiencia forjada
durante el período totalitario y oscuro que ese país y su
pueblo se esfuerzan por dejar atrás.
Por último,
tenga usted, señor Peñalva, la convicción de que
acompañaremos a la señora Menjivar y al sindicato de
CALVO Conservas con nuestra mayor solidaridad, y que
permanecemos atentos y alerta en el seguimiento de esta
situación a la que se ha llegado de manera innecesaria.
Atentamente,
Gerardo
Iglesias
Secretario
Regional UITA