Huelga en Cargill
La planta
parece un campo de concentración |
Pese a las intensas gestiones que se vienen realizando, la
empresa mantiene su postura antisindical que impide que se
alcancen soluciones.
Como informáramos el pasado viernes 9 se ha declarado la
huelga en una planta avícola de Cargill en la ciudad de Jaraguá do Sul en
Santa Catarina, Brasil.
El conflicto se originó ante la negativa de la empresa a
cumplir los acuerdos que las trabajadoras y trabajadores de la avicultura
del estado han firmado con las empresas del sector.
Al declararse el conflicto, la empresa decidió aislar a los
trabajadores que permanecían dentro de la planta de aquellos que estaban
manifestando en la puerta. Para lograrlo procedió a colocar un vallado de
lona en todo el perímetro e instaló un sistema de altavoces que impedía la
comunicación entre unos y otros.
También convocó a trabajadores de otras plantas tratando de
mantener la producción de 120.000 aves al día, y así derrotar la huelga.
Para estas horas están previstas una serie de reuniones
convocadas por el Ministerio de Trabajo para buscar soluciones, pero la
empresa ya adelantó que no aceptará ninguno de los reclamos del sindicato.
Salarios indignos, trabajadores con Lesiones por Esfuerzos
Repetitivos (LER), negativa a negociar con el sindicato, desconocimiento del
derecho de huelga, presiones a los trabajadores, incluso denuncias sobre
posibles limitaciones para retirarse de la planta una vez finalizada la
jornada, esas son las imposiciones con las que tienen que convivir los
trabajadores de Cargill en Jaraguá do Sul.
Ariel Celiberti
© Rel-UITA
13 de diciembre de 2005