Cairo Fernando Reinhardt es presidente de la Federación de
los Trabajadores de las Industrias de la Alimentación de Rio
Grande del Sur (FTIA-RS). En el lanzamiento de la Campaña
Salarial Unificada de la Federación 2012 – 2013, el pasado 2
de marzo en Lajeado, Cairo se destacó con una oratoria
directa y encendida, cuya parte medular reproducimos a
continuación.
“…en Brasil es ahora más fácil conseguir un empleo,
pero un Trabajo Decente, es muy complicado.
Gerardo
(Iglesias) manifestaba que en las unidades de
producción de este país
-rurales o urbanas- no se
respetan los derechos humanos, no se respetan las libertades
sindicales. ¡Y es verdad, y una triste realidad!
En primer lugar debemos decir que el éxito de las empresas
brasileras se basa en el miserable salario que pagan a los
trabajadores y en las condiciones de trabajo que también son
miserables. Es por eso que estas empresas son competitivas
en el exterior.
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El movimiento sindical y la sociedad en su
conjunto no pueden continuar aceptando que en
pleno siglo XXI, los trabajadores y las
trabajadoras sean mutilados en las fábricas y
plantas. |
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El movimiento sindical y la sociedad en su conjunto no
pueden continuar aceptando que en pleno siglo XXI, los
trabajadores y las trabajadoras sean mutilados en las
fábricas y plantas. Que luego de tres o cuatro años de
labor, miles de hombres y mujeres queden lisiados, sufran
dolores horribles que paralizan su vida y sus sueños.
Y mientras esas grandes empresas son beneficiadas con fondos
públicos, esta situación tiende a agravarse. Esto lo tiene
que saber todo el mundo: nunca el gobierno federal ha
distribuido tanto dinero público y sin criterio alguno.
Desde el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES)
se ha contribuido para el crecimiento de varias empresas, y
para que otras se transformen en transnacionales o en
cárteles agroalimentarios.
Esto empezó en el sector de las bebidas, con la fusión de
Brahma
y Antárctica
transformándose en AmBev;
ahora tenemos la fusión de Perdigão
y Sadia
que diera lugar a Brasil Foods. O como el grupo
SEARA que ha recibido fondos del
BNDES
y
auspiciará el Mundial de Fútbol, mientras sus trabajadores
ganan 400 dólares por mes.
El sector agroalimentario es uno que más crece en el país;
no podemos contentarnos con 400 dólares mensuales y
padecer unas condiciones de trabajo infrahumanas.
Creo también que nosotros, los trabajadores, ya no nos
indignamos lo suficiente. Es hora de movilizarnos, o pasará
el tiempo… y llegará el día en el cual el grueso de los
trabajadores ganaremos apenas el salario mínimo” (…)