El pasado
viernes 21 al mediodía, la empresa llamó al personal al comedor de la planta y
dio la noticia: “La fábrica está cerrada”.
Sirel dialogó
con Gerardo Pereira, secretario general del Sindicato Autónomo Tabacalero (SAT),
para conocer los detalles y la actualidad de esta situación.
-¿Cómo ha evolucionado la situación?
-La fábrica permanece ocupada desde el viernes 21, y seguimos
sosteniendo que se trata de una represalia contra el gobierno uruguayo con el
cual Philip Morris International mantiene un litigio.
Los
trabajadores quedamos rehenes de esta maniobra.
De todas formas, la compañía no se va del Uruguay, seguirá manteniendo su
presencia en el país con cigarrillos importados de la Argentina.
-¿Se han reunido con la empresa?
-Tuvimos un encuentro el mismo viernes 21, en el cual nos
comunicaron formalmente el cierre de la planta, pero como un hecho consumado.
Volvimos a reunirnos el lunes 24, y allí planteamos que para
respetar el Convenio Colectivo que estipula un preaviso de 15 días en caso de
cierre, era necesario reabrir la fábrica durante dos semanas y simultáneamente
instalar un diálogo permanente.
Pero ellos rechazaron completamente nuestra propuesta y dijeron
que sólo están dispuestos a negociar para llegar a un acuerdo económico por los
despidos.
-¿Qué proponen en ese plano?
-La cantidad obligatoria por ley según la antigüedad de cada uno,
más un adicional equivalente a seis meses de sueldo. Pero esto es lo mismo que
recibe cualquier trabajador o trabajadora en un caso de despido abusivo, y
justamente de eso se trata este episodio, de un despido abusivo y masivo.
Quiere decir que ofrecen solamente lo que estipula la ley y las
normas laborales del país.
-¿Está prevista otra reunión?
-Sí, para hoy, jueves 27. Nuestra propuesta es que se reabra la
fábrica, y en caso de que eso no ocurra, reclamaremos una indemnización que aún
no hemos estimado.
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La UITA está organizando una
gran Campaña Internacional de denuncia y respaldo a nuestra lucha. |
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-¿Qué reacción ha tenido el gobierno?
-El martes 25 nos reunimos con el subsecretario de Trabajo,
Nelson Loustauneau, quien constató que la empresa está dispuesta a cumplir
con todas sus obligaciones legales, lo que instala la situación en un plano
diferente.
Por ejemplo, que en la plantilla de 45 trabajadores despedidos
afiliados al Sindicato, tenemos 21 que son mayores de 50 años, y muchos tienen
más de 30 años de antigüedad en la planta. El que tiene menos hace ocho años que
se desempeña en la fábrica. Mucho más allá del cese masivo, todo esto
configura una compleja problemática social para los trabajadores y trabajadoras
despedidos.
-¿Qué acciones planean realizar en adelante?
-Estamos solicitando una audiencia con el vicepresidente de la
República, Danilo Astori, y queremos también entrevistarnos con el
presidente José Mujica.
Además de plantearles la situación en la que quedamos los
despedidos, queremos contradecir algunos conceptos que han sido manejados en la
prensa por parte de altos funcionarios gubernamentales y notorios integrantes de
la fuerza política en el gobierno, quienes hacen campaña contra el tabaquismo
festejando que, supuestamente, Philip Morris se va del Uruguay.
Queremos dejarles claro que esta transnacional seguirá vendiendo
sus productos aquí, y que hasta puede poner en peligro a la otra
empresa tabacalera que es de capitales nacionales, inundando la plaza con
cigarros más baratos, lo que podría ser una catástrofe para todo el gremio.
-¿Cómo ha reaccionado el movimiento sindical?
-La central PIT-CNT aprobó una movilización en apoyo a los
gremios en conflicto. Hay varios en ese caso, pero el nuestro es el más grave
porque implica el cierre de una fábrica con despido masivo. Es
probable que esta movilización se concrete para el 3 de noviembre, e incluya un
paro general cuya modalidad se estaría definiendo en la
próxima reunión de la Mesa Representativa de la central, el lunes 31 de
octubre.
Además de la central, el tema ha sido tomado por la UITA
que está coordinando con otros sindicatos de la región y organizando una gran
Campaña Internacional de denuncia Internacional y respaldo con nuestra lucha.
También contamos con el apoyo de la Confederación de Federaciones y
Sindicatos de la Alimentación (COFESA).
-¿Hasta cuándo van a mantener la ocupación?
-Hasta que le encontremos una salida digna y realista al
conflicto, que contemple la variedad de situaciones que presenta el grupo de
trabajadoras y trabajadores despedidos.
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