La Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA) cerró exitosamente su negociación salarial con las diversas patronales concernidas. Sirel dialogó con el dirigente de ese gremio y presidente del Grupo HRCT de la UITA, Norberto Latorre, quien aportó detalles de los resultados de los acuerdos sellados la pasada semana.

-Finalmente, se alcanzó un acuerdo con los empresarios…

-Acabamos de firmar el Convenio Salarial con la Cámara Empresarial más importante que agrupa al 90 por ciento de la actividad, esto es bares, restoranes y a los hoteles de una a cuatro estrellas. En este sector se ha logrado un 30 por ciento de aumento salarial que, esta vez, al contrario de lo que venía ocurriendo en años anteriores, se trata de un incremento remunerativo, esto es que se incorpora al salario de base, lo que a su vez incrementa los adicionales. Este aumento se irá instrumentando en tres partes: mayo, junio y julio, para llegar a agosto con todo el incremento integrado. En la negociación los empresarios reconocieron las cifras de inflación real, que son distintas a las que difunde el Estado, y que han afectado el ingreso de los trabajadores.

-¿Fueron negociaciones fluidas?

-Hubo algunas dificultades porque se trata de una actividad a nivel nacional y a las reuniones viene un representante de cada sector. También hay que discutir la realidad de cada región del país, que tiene muchas variables en clima, población, calidad de instalaciones y afluencia turística. Este aumento es para todos, y después se ven las particularidades. Por ejemplo ahora viene la temporada alta en el sur del país, y en Bariloche, por ejemplo, se percibe un 25 por ciento adicional por zona fría más un 28 por temporada alta, esto hace a partir de julio un ingreso 53 por ciento por encima del resto del país hasta el fin de la temporada.

-¿Cuál fue el resultado en las cadenas y hoteles de cinco estrellas?

-Allí hemos convenido un 25 por ciento de incremento de los sueldos básicos, más un 8 por ciento adicional por turismo, como forma de percibir un mayor aumento, lo que significa que este adicional quedará como algo definitivo.

-¿A cuánta gente comprende este Convenio?

-Aproximadamente a 200 mil trabajadores y trabajadoras. Es el 90 por ciento del total de nuestros representados, ya que aún seguimos negociando con la Cámara del Catering y la de los hoteles de alta rotatividad o de alojamiento transitorio.

-¿La actividad turística continúa creciendo en Argentina?

-Los hoteles de cuatro y cinco estrellas están trabajando prácticamente con un 100 por ciento de ocupación. Por suerte podemos decir que el crecimiento de la actividad se sostiene. Por eso tenemos aún más motivación para mantener y profundizar nuestra lucha contra la falsa media jornada, una forma de subdeclaración de los empresarios que es una forma de estafa para el que trabaja, pero además una evasión de impuestos y una forma de escatimarle recursos a nuestra obra social de la cual depende la atención de salud de nuestros afiliados y afiliadas y de sus familias, y también es una evasión con respecto al propio sindicato. Estamos dando esta lucha en todos lados, haciendo inspecciones en las empresas, escraches contra los evasores. Hemos firmado un acuerdo con los empresarios relativo a este punto, según el cual los trabajadores tienen la obligación de notificar al sindicato cuántos empleados están bajo ese régimen. Eso se puede hacer por medio de un simple formulario en nuestra página web, y luego nosotros verificamos mediante una inspección si esas declaraciones corresponden a la realidad.

-¿Ustedes como sindicato pueden hacer esa inspección o deben tener acompañamiento del Ministerio de Trabajo?

-Las dos cosas son posibles. La inspección del sindicato es de mutuo acuerdo, pero si la empresa se niega nos presentamos con el Ministerio, y eso, en general, no es conveniente para la patronal. La mayoría no se niega, y también nos dan acceso a la documentación. Y cuando se niegan, la ley nos da muchas alternativas para alcanzar nuestro objetivo, incluso con la fuerza pública.

Esta va a ser la lucha más dura, más aún que la salarial, porque muchas veces después de un aumento las empresas recurren a estos procedimientos, y también al trabajo en negro para mantener sus beneficios. Venimos ganando terreno progresivamente, y vamos a continuar. Este sistema de notificación obligatoria responsabiliza más a los dirigentes de sección, ya que si no la cumplen son pasibles de sanciones sindicales, y esta es una estrategia aprobada en un plenario de secretarios generales a nivel nacional.

-Tu estás presidiendo el Grupo HRCT en el ámbito de toda la UITA. ¿Cuáles son los principales desafíos del sector a nivel mundial en la actualidad?

-En la pasada Conferencia del Grupo HRCT celebrada en Segovia, España, en la cual participó Gerardo Iglesias como secretario regional de la UITA para América Latina, y a la cual invitamos a los compañeros de México y Venezuela, vimos que realmente todas las organizaciones presentes exhibieron una clara voluntad de luchar por estos mismos temas, porque los dueños de las cadenas y los grandes hoteles son cada día más ricos y los trabajadores son cada vez más pobres, padecen peores condiciones laborales, salarios bajos, discriminación de género, etc. Allí en Segovia, por primera vez se conformó un grupo de seguimiento de los sectores de hotelería, catering y parte del turismo. En junio próximo se reunirá este grupo en Ginebra para ir estableciendo estrategias comunes. Por ejemplo, México y Argentina, y por intermedio de la secretaría regional, estamos trabajando para ver cómo podemos obtener un Convenio marco para la región, en el cual alcanzar una igualdad en las condiciones de trabajo para empezar, porque reconocemos que a nivel salarial las situaciones pueden ser diferentes en cada país, pero el trabajo es el mismo en cualquier lado. Así que comenzamos a desarrollar esta tarea que, pensamos, dará frutos ya el año que viene. Y más estratégicamente, esperamos que este camino nos lleve a emparejar las situaciones a nivel de todo el mundo.